Recientemente, se han revelado mensajes de WhatsApp entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el exministro José Luis Ábalos, que evidencian las tensiones existentes con ciertos líderes autonómicos. La información fue publicada en exclusiva por el diario El Mundo.
En estos intercambios de mensajes, Sánchez intenta gestionar las críticas que algunos barones díscolos han realizado en público. En un tono despectivo, califica al expresidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, como “impresentable” y “petardo”. Estas palabras reflejan un malestar palpable dentro del partido.
La filtración de estos mensajes ha suscitado una fuerte reacción dentro del PSOE. Óscar López, dirigente del partido, ha calificado de “muy grave” la divulgación de comunicaciones privadas entre Sánchez y Ábalos. Además, ha exigido una investigación para esclarecer cómo se produjo esta filtración.
Este episodio pone de manifiesto las divisiones internas en el seno del PSOE y plantea interrogantes sobre la cohesión del partido ante los desafíos políticos actuales. La situación se complica aún más con la creciente presión que enfrentan los líderes autonómicos en sus respectivas comunidades.