El martes 15 de julio marca el comienzo de la canícula, que se define como el periodo más cálido del año en España, abarcando desde el 15 de julio hasta el 15 de agosto. Durante esta etapa, se prevé un notable aumento de las temperaturas en diversas regiones del país.
Particularmente en el sur peninsular, se anticipa que las temperaturas alcancen los 40 grados Celsius, siendo Andalucía la comunidad autónoma más afectada por este fenómeno. Este incremento térmico puede tener un impacto significativo en la vida diaria y en las actividades al aire libre.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido alertas sobre las condiciones extremas que se esperan durante este periodo. Las altas temperaturas pueden generar riesgos para la salud, especialmente entre poblaciones vulnerables como ancianos y personas con enfermedades preexistentes.
Es recomendable que la población tome precauciones adecuadas para evitar golpes de calor y otros problemas relacionados con el calor extremo. Se sugiere mantenerse hidratado, evitar la exposición directa al sol durante las horas pico y usar ropa ligera.
Además de los efectos sobre la salud, estas temperaturas elevadas pueden influir en diversos sectores económicos, incluyendo la agricultura y el turismo. Los cultivos pueden verse afectados por la falta de agua y el estrés térmico, mientras que las altas temperaturas podrían afectar la afluencia turística en algunas áreas.
Las autoridades locales están preparadas para gestionar los posibles inconvenientes derivados de esta ola de calor, implementando medidas para garantizar la seguridad y bienestar de los ciudadanos durante este período crítico.