Opinión

Luna lunera

Aixa Almagro | Domingo 28 de septiembre de 2025

Por aquí, con la brisa del Cabo de Gata que ya se empieza a notar, pensando en la vida... y en la Luna. Sí, en la Luna. Y no, no me he vuelto loca. Resulta que hoy se cumplen 66 años de una auténtica hazaña: la sonda soviética Luna 2 se estrelló con éxito contra nuestro satélite. ¿Os imagináis? Lanzaron un trasto de 390 kilos y lo hicieron impactar en el Mare Imbrium. ¡Y eso que no tenía ni propulsión! Es como cuando mi abuelo Manolo se empeñaba en arreglar la persiana de casa con un martillo y un destornillador, a lo "a la almeriense", y al final siempre lo conseguía. Puro ingenio y un par de narices.

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Y es que, pensándolo bien, la carrera espacial y el día a día de mi familia se parecen más de lo que parece. La Luna 2 fue la primera en llegar, en marcar un hito. Y en casa, la primera en marcar un hito fui yo, la primera en nacer. O eso dice mi abuela, que la tengo como la presidenta del club de fans de AIXA, la del Almería, que en un par de años seremos imparables, ya veréis.

El caso es que los soviéticos, con esa sonda tan chiquitita, demostraron que se podía. Que lo que parecía imposible, era solo cuestión de tiempo y de tirar pa'lante. Y eso es un poco el lema que me han enseñado mis padres y mi abuela. A ver, que yo no estoy mandando sondas espaciales, pero mis pequeños logros (como conseguir que mi abuela pruebe la pizza con piña, por ejemplo) se sienten igual de épicos.

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Además, ¿sabéis qué más me ha gustado de esta historia? Que la sonda Luna 2 no se quedó ahí, flotando. Impactó, se hizo pedazos. Y dejó una marca, la primera de la humanidad en otro mundo. Un recordatorio de que a veces, para avanzar, hay que lanzarse sin miedo y aceptar el impacto. No sé, me ha dado por pensar que a lo mejor mi abuelo Manolo tenía razón con el martillo: a veces, el mejor plan es el de "a ver qué pasa". Y si se rompe, pues se arregla. Pero lo importante es ir a por ello, como hicieron esos pioneros con su sonda.

Así que ya sabéis, la próxima vez que miréis a la Luna, recordad que hace 66 años, un pequeño objeto de metal llegó hasta allí. Y que si ellos pudieron, nosotros también. ¡A por todas, Almería!