El Pleno del Ayuntamiento de Almería se ha convertido hoy en el escenario de un tenso debate a raíz del reciente decreto de la alcaldesa, María del Mar Vázquez, que resta competencias al concejal de Cultura, Diego Cruz. El asunto, que ha generado una notable controversia en la ciudad, fue el eje central de un enfrentamiento verbal entre el concejal socialista Antonio Ruano y el propio Cruz, quien defendió la decisión de la alcaldía.
La polémica se desató después de la Feria de Almería, cuando la alcaldesa decidió transferir a la concejala Eloísa Cabrera la gestión de eventos de gran envergadura. El edil socialista Antonio Ruano fue el primero en tomar la palabra, criticando duramente lo que calificó como un "desmantelamiento" de las responsabilidades del Área de Cultura.
En su intervención, Ruano enumeró de forma detallada todas las funciones que, según él, le han sido arrebatadas a Diego Cruz: "Le han quitado la Navidad, la iluminación y la decoración extraordinaria. Se ha quedado sin las atracciones de Navidad y ni las de Feria. Se ha quedado sin la Feria de Alfarería, sin el Mercado Navideño, sin la Zambomba Flamenca, sin la Batalla de Flores, sin el cartel de Feria, sin el abanico de la Feria, sin el pregón de los colorados, sin el capote de paseo, sin los espectáculos pirotécnicos de San Juan o de la Feria, etc.". Ruano concluyó su crítica afirmando que a Cruz solo le queda la "programación cultural anual y la Cabalgata de Reyes".
El concejal Diego Cruz no tardó en responder a las acusaciones, defendiendo con vehemencia sus competencias y la decisión del equipo de gobierno. Con un tono visiblemente molesto, Cruz acusó a Ruano de desinformación e ignorancia sobre el trabajo del Área de Cultura.
"Usted se olvida de la Feria del Libro. Usted se olvida de la Jornada del Teatro del Siglo de Oro. Usted se olvida de las bibliotecas. Usted se olvida del Archivo Municipal. Usted se olvida de la competencia que tiene el Área de Educación. Usted se olvida de los cuatro festivales que ponen a Almería en el mapa de los festivales nacionales e internacionales. Usted se olvida de nuestra programación de invierno, de otoño, de primavera y de verano", replicó el concejal, destacando la amplia cartera de eventos y responsabilidades que aún maneja su departamento.
Cruz justificó la reorganización de competencias como una medida "coherente y consensuada", diseñada para mejorar la calidad y la gestión de los eventos. "Nos garantiza que cada una de las áreas puedan desarrollar sus actividades, pues, quizás, con más calidad, con más tiempo y garantizar que los almerienses puedan disfrutarlas", afirmó.
Para finalizar, el concejal invitó a Ruano a informarse mejor: "Señor Ruano, dese una vuelta por el Área de Cultura y yo, con mucho gusto, le enseñaré la relación de competencias que tiene el Área de Cultura todavía".
El debate en el Pleno pone de manifiesto la tensión política generada por una decisión que, según el equipo de gobierno, busca la eficiencia, pero que la oposición interpreta como un castigo o una pérdida de peso político para el concejal de Cultura. La gestión de los grandes eventos festivos en Almería seguirá en el centro de la atención política en los próximos meses.