La UD Almería ha llevado a cabo un evento muy especial que resalta el compromiso del club con la comunidad. Este lunes, los jugadores se reunieron en el Hospital Universitario Torrecárdenas para compartir momentos inolvidables con los niños y niñas hospitalizados, una actividad que se ha convertido en una tradición llena de cariño y solidaridad.
Los capitanes Fernando y Adrián Embarba, junto a Andrés Fernández, Alex Muñoz, Aridane y Gui Guedes, así como Paqui Campoy y Lucía del equipo femenino, se presentaron en el centro hospitalario acompañados por Joao Gonzalves. Allí fueron recibidos por Manuel Vida, director gerente del hospital, y Felipe Cañadas, subdirector, quienes les dieron la bienvenida junto a otros miembros del personal.
Para los rojiblancos, esta visita no es simplemente un acto más en su agenda; es una oportunidad para conectar con los pequeños y sus familias. El objetivo es brindarles momentos de alegría en estas fechas tan significativas. Los jugadores mostraron su empatía al interactuar con cada niño y niña que visitaron en sus habitaciones y áreas de juegos. Firmaron autógrafos, conversaron sobre sus intereses y dejaron regalos que incluían camisetas, bufandas del club e incluso peluches para los más pequeños.
Andrés Fernández, quien experimentó su primera visita a Torrecárdenas aunque ya había participado en eventos similares en otros equipos, compartió su entusiasmo: “para nosotros es una experiencia muy bonita el poderles hacer pasar un rato agradable y hacerles sonreír”. Además, destacó la importancia de estos encuentros al afirmar que “venimos a apoyarles, a darles ánimos, pero son ellos también, y sus familiares, los que nos transmiten su respaldo para cumplir nuestros objetivos. Son momentos muy emotivos”.
Este tipo de iniciativas refuerzan la conexión entre la UD Almería y su afición, mostrando que el fútbol va más allá del terreno de juego. La solidaridad y el apoyo mutuo son valores fundamentales que siempre estarán presentes en la esencia del club.