Opinión

La delincuencia en Vícar

Juan Torrijos Arribas | Sábado 20 de diciembre de 2025

Los datos dados a conocer sobre los nueve primeros meses en lo que a delincuencia se refiere en nuestra provincia, no le deben haber sentado muy bien al alcalde de Vícar, Antonio Bonilla. Nos venía dando la impresión de que don Antonio tenía bien controlado el pueblo, las noticias que de él nos llegaban, algunas con fotos incluidas, era que todo iba cada día mejor. Algo se estaba gestando en los bajos fondos del municipio que no lo estaba controlando. Podemos pensar que el señor Bonilla no sabía lo que estaba ocurriendo en lo que a delitos en su pueblo se refiere, pues imagino que de saberlo habría intentado poner algún remedio.

¿Lo sabía? Si era así, ¿Cuántas veces ha llamado a su jefe político, el señor Martín, para exigirle seguridad en su término municipal? Los delitos han aumentado en más de un quince (15) por cien en los últimos meses. Los sexuales en más de un veinticinco (25) por ciento, los hurtos en más de un diecisiete (17) por cien. El aumento de esos delitos ha puesto en cabecera de la provincial al pueblo de Vícar. Lo que no debe haberle hecho mucha, por no decir ninguna gracia a su alcalde.

Los delitos los soportan y los sufren los vecinos y sus familias. Eso lo saben los regidores, que en el fondo es a los que les llegan las quejas de los sufridos ciudadanos y votantes. Está muy bien ofrecer el pueblo unas aceras, avenidas y plazas que son fenomenales, pero si cabe, y ello es más necesario, es que los hombres y las mujeres se sientan seguros cuando pasean por esas infraestructuras que el ayuntamiento pone a disposición de ellos.

Que los padres no estén penando mientras sus hijas salen con las amigas, con todo el derecho del mundo, a tomar una copa un viernes o sábado noche. No les vale a los padres el que los alcaldes quieran escurrir el bulto ante la inseguridad en la que viven sus hijos, y que digan que eso es una cosa de Madrid. En la capital de España mandan unos políticos que son del mismo partido que el señor Bonilla, en Almería el representante de Pedro y de Marlaska es compañero de don Antonio. Basta de excusas. No podemos seguir ocultando lo que está ocurriendo en nuestros pueblos y ciudades, no se puede tolerar que la intranquilidad ronde a nuestras hijas en las calles, y que encima se defienda en la Tv a los delincuentes, como ocurría hace unos días con la violación de una joven almeriense en Málaga.

Ponemos en esta ocasión el acento en Vícar y Antonio Bonilla por ser el municipio donde más ha subido la delincuencia en estos últimos meses, pero debería el resto de los regidores municipales ser conscientes de lo poco que hacen ante la inseguridad que se vive en sus pueblos. Y dejen de echar la culpa a los demás. El día que los ciudadanos, hartos de violencia contra sus hijas e hijos, monten patrullas vecinales para defenderse no digan que no están avisados.

Pd. Este semana se ha reunido el señor Bonilla con el responsable de la seguridad de la provincia, señor Martín, que al mismo tiempo es el secretario general del Psoe. Don José María, ¿qué le ha prometido a don Antonio para que llegue la seguridad a los vecinos de Vícar?