La presidenta de la Junta de Extremadura, María Guardiola, ha establecido comunicación con Óscar Fernández, quien es el candidato de Vox, en relación a los preparativos para la investidura. Este contacto se produce en un contexto en el que se busca avanzar en la formación de un gobierno regional.
Por otro lado, la gestora del PSOE en Extremadura ha optado por no pronunciarse sobre si su partido se abstendrá durante la votación de investidura de Guardiola. Esta decisión mantiene cierta incertidumbre respecto al apoyo que podría recibir la presidenta electa en el proceso.
El diálogo entre Guardiola y Fernández refleja una estrategia orientada a consolidar apoyos necesarios para garantizar la gobernabilidad en la región. La presidenta ha manifestado su intención de centrarse exclusivamente en las necesidades y prioridades de Extremadura, lo que podría influir en las negociaciones políticas actuales.
A medida que se acercan los plazos para la investidura, las dinámicas entre los diferentes partidos políticos se tornan cada vez más relevantes. La postura del PSOE será clave para determinar el rumbo que tomará esta situación política en los próximos días.