Derrota anunciada

Desde el punto de vista político, la semana ha estado dominada por el debate parlamentario en el Congreso de los Diputados sobre la posibilidad de transferir competencias a la Generalitat catalana, para poder realizar su famosa consulta por el derecho a decidir, eufemismo con que denominan al referendum sobre la independencia de Cataluña, tal y como anticipan las preguntas a realizar a la ciudadanía en noviembre próximo.
Como estaba previsto, se ha producido la derrota anunciada, por las declaraciones previas realizadas por los grandes Partidos, posición a la que se han sumado otros más pequeños, hasta determinar que casi el 90% de los diputados han dicho un rotundo no a las pretensiones del Parlamento catalán.
Es evidente, que en este sentido, no ha habido sorpresas, pero ha sido agradable contemplar la posición de PP y de PSOE, con intervenciones brillantes de sus respectivos líderes, Srs. Rajoy y Rubalcaba, que, con ligeros matices diferenciados, han puesto de manifiesto que el único camino posible es el respeto a la Ley y la Constitución, mientras que otras vías ni son posibles, ni son deseables, salvo que abiertamente se opte, en Cataluña, por la ilegalidad más manifiesta, cuestión que no es impensable que se produzca. Estaremos atentos a la deriva que toma el Sr. Mas y sus socios, en su locura independentista. La cobardía del Sr. Mas también ha sido notoria, al no atreverse a defender, el mismo, la posición catalana, enviando para tal menester a peones de segundo nivel.