Opinión

Almería o el olvido eterno de la Junta

Luis Rogelio Rodríguez | Viernes 25 de abril de 2014
El presidente del Partido Popular andaluz, Juan Manuel Moreno, ha dicho en Almería algo que, no por conocido, es menos grave: Almería no resulta prioritaria para la Junta de Andalucía. Sé que no es un argumento nuevo, pero resulta doloroso admitir una realidad que los hechos, tercamente, se empeñan en confirmar. Tanto con el Ayuntamiento como con la Diputación, la Junta tiene deudas y proyectos pendientes y bloqueados por interés puramente político, cuando muchos de ellos, al final, crearían empleo y prosperidad a los almerienses. Ahí está la permanente y dolorosa reclamación sobre el estado de la Plaza Vieja, la inejecución de la conexión con la A-92, el abandono de la tímida recuperación del Cable Inglés, la deuda contraída con el Ayuntamiento en materia de Dependencia o el PERI de San Cristóbal, entre otros. Una relación de asuntos que ya conoce de primera mano el presidente del PP Andaluz, del mismo modo que también lo conocieron en su día los presidentes Chaves y Griñán, e incluso la propia Susana Díaz, quien, al preguntarme qué asuntos pendientes tenía la Junta con Almería, le facilité la misma lista que le había pasado años antes a sus predecesores. Toda esta desidia es fruto de una realidad triste y penosa: los socialistas sevillanos no han sido capaces de entender jamás que, dentro de las muchas Andalucías que existen, Almería no puede seguir siendo la eterna marginada. Lamentablemente la Junta no ve Almería como una provincia prioritaria para sus inversiones. Y aunque lo cierto es que la ineficacia y la parálisis del actual gobierno bipartito (PSOE-IU) que preside doña Susana Díaz hacen que la Junta tenga repartida por toda Andalucía una amplísima lista de fracasos, los almerienses acumulamos un déficit especialmente doloroso en cuanto actuaciones pendientes de la Junta. Por eso creo que resulta especialmente interesante el anuncio que realizó Juanma Moreno en el Ayuntamiento de Almería de que iba a solicitar de la presidenta Díaz una reunión de coordinación entre ayuntamientos de capital y diputaciones provinciales para actualizar las deudas que la Junta tiene con las administraciones más cercanas a los ciudadanos y agilizar el cumplimiento de las responsabilidades y compromisos de la administración que preside la señora Díaz. Ayuntamientos y diputaciones no podemos estar permanentemente dedicando recursos a resolver competencias y actuar allí donde corresponde a una Junta de Andalucía más pendiente de satisfacer las demandas más llamativas de sus socios radicales que de trabajar por resolver los enormes problemas de Andalucía.