Muchas gracias a todos

En mi proclamación como Alcalde de Almería, hace ya casi trece años, asumí con responsabilidad el firme compromiso de servir a los intereses los ciudadanos almerienses, con el afán de hacerles protagonistas del cambio que Almería demandaba y construir con ellos una ciudad más moderna y plenamente integrada en el modelo de las grandes capitales de provincia de España. Hasta hace apenas unos días me ha cabido el honor de encabezar la ilusionante tarea de reinterpretar desde el Ayuntamiento la ciudad que conocíamos, para llevar a cabo esa gran y positiva transformación que Almería necesitaba y que había pedido en las urnas el conjunto de la sociedad almeriense. Mi decisión de no continuar siendo alcalde de Almería ya la anuncié al inicio de la campaña de las últimas elecciones municipales, antes de que se conociera la decisión de mi partido de incompatibilizar el desempeño de dos cargos electos. Hoy, cuando vuelvo atrás la mirada, no puedo sino sentir orgullo y gratitud hacia cuantos me han acompañado en este camino y a los que ahora yo, desde otra responsabilidad, acompañaré en el supremo afán de servir por igual a todos los almerienses. Creo que en estos años Almería ha experimentado una transformación sin precedentes en todos los órdenes. Pero sobre todo, creo que el mejor balance es poder decir que los almerienses han tenido en su Ayuntamiento una administración cercana y solvente, capaz de dar respuesta a sus necesidades de todos los barrios y de todos los colectivos sociales, a los que desde aquí quiero dar las gracias por la confianza que han depositado en nosotros. Entre todos hemos conseguido muchas cosas y muy buenas para Almería, pero también es justo hacer un balance autocrítico de mis errores y de asumir mis limitaciones, desde la firme voluntad de seguir trabajando desde otra responsabilidad con la sociedad almeriense. Almería es una gran ciudad que mira hacia el futuro con ilusión. Y en la forja de ese futuro, una nueva generación reclama con justicia, dentro y fuera del Ayuntamiento, su necesario protagonismo. Por todo ello, guiado por el convencimiento de prestar el mejor servicio a los almerienses, entiendo que es el momento de poner fin a mi mandato como Alcalde. Deseo expresar mi gratitud a todos los vecinos de Almería, a todas las personas que han asumido responsabilidades en el resto de administraciones del Estado durante estos años y a cuantos me han ayudado con lealtad y generosidad a desempeñar mis funciones. También a los medios de comunicación, que han sido testigos y notarios de estos apasionantes años. Y naturalmente, mi gratitud personal hacia mi familia y amigos, cuyo respaldo y cariño he sentido siempre vivos. Ser Alcalde de Almería ha sido un honor y un privilegio. Muchas gracias a todos.