Finalizado el encuentro, los jugadores de la UD Almería y su entrenador, Rubi, se acercaron a los doscientos aficionados rojiblancos que habían viajado desde Almería hasta el Estadio Carlos Tartiere de Oviedo. Con un gesto lleno de respeto y humildad, pidieron disculpas por no haber podido avanzar en su camino hacia la Primera División.
Un objetivo ambicioso
La temporada comenzó con grandes expectativas en agosto, con el claro propósito de alcanzar la máxima categoría del fútbol español. A pesar de que el equipo hizo méritos suficientes para superar al conjunto asturiano en las semifinales de los play-off de ascenso, no lograron cumplir con el sueño que todos anhelaban.
Los seguidores del Almería han sido un pilar fundamental durante toda la campaña, mostrando su apoyo incondicional en cada desplazamiento tanto en Liga como en Copa del Rey. Este miércoles, a pesar de ser un día laborable y tener que recorrer más de dos mil kilómetros, también estuvieron presentes en Oviedo, demostrando su lealtad y pasión por el equipo.
Agradecimiento y disculpas
Conscientes del esfuerzo realizado por sus aficionados, los jugadores y el cuerpo técnico se acercaron para expresar su agradecimiento. No solo querían reconocer el sacrificio de aquellos que viajaron para animarles, sino también ofrecer disculpas por no haber podido brindarles la alegría esperada. Estas disculpas son extensibles a toda la afición que ha estado apoyando al equipo a lo largo de la temporada.
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