La plataforma BDS Almería (Boicot, Desinversiones y Sanciones) se ha sumado a la convocatoria de una cacerolada pública el próximo viernes 22 de agosto a las 11:00 de la mañana. El acto tendrá lugar frente a la Subdelegación del Gobierno en la calle Arapiles de la capital almeriense.
El objetivo de la concentración es denunciar de forma sonora lo que los organizadores califican como "genocidio sobre el pueblo palestino" y exigir al Gobierno español que adopte medidas concretas contra el Estado de Israel. En concreto, se demanda la ruptura total de relaciones diplomáticas y que se hagan efectivas "de verdad" las sanciones, yendo más allá de las declaraciones institucionales.
La convocatoria surge en un contexto de escalada bélica en la Franja de Gaza. Según cifras de la ONU de aquel periodo, el conflicto de 2014, que se prolongó durante 51 días, resultó en la muerte de más de 2.100 palestinos, la gran mayoría civiles, y de 73 israelíes, en su mayoría soldados. La ofensiva, denominada "Margen Protector" por Israel, provocó una crisis humanitaria internacional y desencadenó una ola de protestas en ciudades de todo el mundo, similares a la convocada ahora en Almería.
Los organizadores hacen un llamamiento a la ciudadanía para que acuda con sus propias cacerolas, cucharas o "cualquier instrumento o cacharro sonoro" con el fin de "hacer mucho ruido por Palestina". Esta forma de protesta, popularizada en diversas movilizaciones sociales a nivel global, busca simbolizar de manera audible el descontento y la demanda de atención urgente sobre una causa.
El movimiento BDS, de origen palestino y con presencia internacional, aboga por ejercer presión económica, política y cultural sobre Israel a través de boicots hasta que este cumpla con el derecho internacional y los derechos palestinos. La convocatoria de Almería se enmarca dentro de esta estrategia de presión a los gobiernos para que tomen partido con acciones concretas.
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