La jornada de este jueves ha estado marcada por la comparecencia judicial y posterior liberación con medidas cautelares de los cinco detenidos en la segunda fase del caso Mascarillas. El presidente de la Diputación, Javier Aureliano García (PP), ha regresado a la sede de la institución provincial, donde, según se ha podido constatar, permanece en su despacho desde las 17:00 horas.
La decisión del Juzgado de Instrucción número 1 de Almería de dejar en libertad a García y a los otros cuatro detenidos —el vicepresidente Fernando Giménez, el alcalde de Fines Rodrigo Sánchez, el hijo de este y un funcionario— ha generado un movimiento interno en el Partido Popular. Las puertas del Palacio Provincial han permanecido "cerradas a cal y canto" durante la tarde, mientras se desarrollaba una reunión de cargos del PP de toda la provincia en el interior de la sede.
Por su parte, el presidente en funciones de la Diputación, Ángel Escobar, abandonó el Palacio Provincial en su vehículo pasadas las 19:00 horas.
El abogado de Javier Aureliano García, Joaquín Monterreal, defendió a la salida del Juzgado la "colaboración" de su cliente y la transparencia de su patrimonio, cuyos ingresos asegura que están "perfectamente declarados a la Hacienda Pública". El letrado lamentó que la situación no se hubiera solventado "con una aportación de documentación".
La Fiscalía había solicitado libertad con retirada de pasaporte y comparecencias periódicas para los cinco detenidos, mientras que la acusación popular del PSOE pidió prisión provisional. El juez finalmente optó por la libertad con medidas cautelares para todos ellos.
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