Almería cae en Cádiz por decisiones arbitrales polémicas

El Almería se presentó en el Nuevo Mirandilla con la esperanza de romper su racha negativa fuera de casa y dar un paso decisivo en sus aspiraciones por el ascenso. A pesar de que el encuentro terminó con un resultado adverso, los rojiblancos demostraron una gran actitud y entrega, aunque fueron víctimas de decisiones arbitrales muy discutibles. El partido comenzó con un gol que colocó al equipo indálico en ventaja (0-1), pero las expulsiones a lo largo del encuentro complicaron enormemente su situación.

Un inicio prometedor

Rubi mantuvo la misma alineación que había cosechado una victoria contundente ante el Eldense, buscando así continuar con el buen juego mostrado. Desde el primer momento, el Almería tomó la iniciativa, controlando el balón aunque sin generar ocasiones claras de peligro. Como bien dijo su entrenador antes del partido, “su equipo puede estar minutos sin que pase nada y luego crear ocasiones por su potencial ofensivo”. Y aunque no se produjeron muchas oportunidades al principio, al menos mantenían a raya al Cádiz, que no podía hacerse con la pelota.

Sin embargo, todo cambió en el minuto 30 cuando Kaiky fue expulsado tras una falta sobre Roger. La decisión del árbitro fue severa y dejó al Almería con diez jugadores. A pesar de esta adversidad, los indálicos sorprendieron al marcar el 0-1 gracias a un córner ejecutado por Nico Melamed que fue cabeceado a la red por Melero. En los minutos adicionales del primer tiempo, Leo Baptistao tuvo la oportunidad de aumentar la ventaja, pero su remate fue detenido por el portero gaditano.

Desafíos en la segunda parte

En el segundo tiempo, Rubi realizó un cambio estratégico al introducir a Bruno Langa para reforzar la defensa. Sin embargo, las cosas se complicaron aún más cuando Langa recibió otra tarjeta roja en una jugada polémica. Aunque él intentó jugar el balón, también impactó al rival y eso le costó caro al equipo. Con solo nueve jugadores en el campo y 40 minutos por delante, la situación se tornaba crítica.

A pesar de estar en desventaja numérica, los rojiblancos lucharon con todas sus fuerzas para mantener la ventaja. En una contra rápida, Melero estuvo cerca de marcar nuevamente, pero su tiro se fue desviado. Con cada minuto que pasaba, las llegadas del Cádiz aumentaban y la presión sobre el Almería crecía. Rubi mostró su frustración ante las decisiones arbitrales y fue expulsado en el minuto 69.

Un final amargo

Pese a todos los obstáculos enfrentados durante el partido, parecía que el Almería podría llevarse los tres puntos hasta que llegó el tiempo de descuento. En dos momentos críticos (minutos 95 y 97), vio cómo se le escapaba tanto la victoria como un posible empate. Tras finalizar el encuentro, hubo tensiones entre los jugadores de ambos equipos y nuevas protestas hacia el árbitro resultaron en la expulsión de Nico Melamed.

Aunque este resultado es doloroso para los aficionados y para el equipo mismo, queda claro que la lucha del Almería sigue viva. Con determinación y esfuerzo colectivo, hay motivos para seguir creyendo en las posibilidades futuras del equipo.

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