La Diputación Provincial de Almería ha sacado a adjudicado un contrato por valor de 90.750 euros —IVA incluido— para atraer a 30.000 turistas británicos que vuelen directamente a la provincia entre abril y noviembre de 2025. El cálculo, sencillo y elocuente, sitúa el coste estimado de captación en apenas 3 euros por turista, lo que da pie al sugerente titular que encabeza este reportaje.
La aerolínea JET2.COM LTD ha sido la adjudicataria, y el servicio se extenderá hasta el mes de noviembre de este mismo año.
La iniciativa, impulsada desde el Área de Presidencia, Reto Demográfico, Patrimonio Histórico y Turismo, parte de una convicción institucional clara: “el turismo es un pilar básico del sector económico almeriense” y la marca ‘Costa de Almería’ debe afianzarse en “los diferentes mercados turísticos emisores que resultan de interés para nuestro destino”.
Un plan directo al corazón del mercado británico
La propuesta de contratación pública tiene como objeto un “servicio de captación de turistas en origen mediante la promoción del destino turístico ‘Costa de Almería’ en el mercado británico”. La meta es clara: 30.000 visitantes británicos que lleguen en vuelo directo, se alojen un mínimo de cinco noches en hoteles de la provincia y realicen, al menos, una excursión a un municipio diferente del que pernocten.
El contrato exige que, si el adjudicatario no es una aerolínea, aporte los acuerdos firmados con la compañía aérea que ejecutará esos vuelos. Esta es, según la memoria justificativa, una “obligación esencial para la adjudicación”, lo que deja fuera cualquier campaña que no garantice físicamente el desplazamiento de turistas desde Reino Unido hasta Almería.
Qué se pagará y qué no
La Diputación ha previsto todo tipo de detalles. Los pagos se realizarán previa acreditación con certificados emitidos por AENA, por los establecimientos hoteleros implicados y por medio del plan de marketing desarrollado en origen. Y, como es habitual, se establecen penalizaciones en caso de incumplimiento: se multará con dos euros por turista no traído si no se cumple el mínimo de 30.000 pasajeros en vuelo directo con al menos cinco noches de estancia.
Además, si las penalizaciones superan el 50% del importe del contrato (sin IVA), se procederá directamente a resolverlo.
Prevención electoral
El contrato estará vigente hasta el 30 de noviembre de 2025, pero con una excepción muy específica: la campaña no podrá coincidir con periodos electorales en Andalucía. Si hay elecciones convocadas durante esos meses, las acciones publicitarias deberán suspenderse “desde el día de la convocatoria hasta el de la votación”. Eso sí, el servicio podría reanudarse justo al día siguiente.
La normativa regional sobre publicidad institucional impone estas restricciones, salvo en el caso de campañas esenciales para el “interés general o el desarrollo correcto de los servicios públicos”, categoría en la que —por ahora— no se ha catalogado esta acción.
Por qué Almería mira al Reino Unido
La memoria justificativa del contrato detalla con exhaustividad el perfil del turista británico y su enorme relevancia para el Estado español: solo en 2023, 17,3 millones de británicos visitaron España, representando el 20,4% del total. De ellos, una parte llegó a Almería, lo que ha situado al Reino Unido como “el primer lugar en cuanto a número de turistas extranjeros recibidos” en la provincia.
Según datos del Office for National Statistics, España sigue siendo el principal destino de vacaciones de los británicos. El turista británico medio tiene 45,6 años, viaja principalmente por ocio, se aloja en hoteles, viaja en pareja o en familia, disfruta de la playa y de las compras, y no suele contratar paquete turístico.
La Diputación insiste en que este tipo de viajero no concibe las vacaciones como un lujo, sino como una necesidad. Por eso, incluso en tiempos de crisis, mantienen sus viajes, aunque adaptan el gasto y la duración. Aún así, el gasto medio por persona y día en 2023 fue de 151 euros, con una estancia media de 6,9 noches.
“Costa de Almería”, en busca de turistas más allá del verano
La campaña, además, tiene un objetivo estructural: romper la estacionalidad. La provincia quiere atraer visitantes fuera de la temporada alta, y por eso el contrato cubre desde mediados de abril hasta el 30 de noviembre. En este tiempo, el adjudicatario deberá garantizar los vuelos, las pernoctaciones y las actividades turísticas.
“El desarrollo de la provincia de Almería como destino turístico seguro, sostenible y de calidad”, apunta el documento, debe traducirse en una “filosofía empresarial e institucional para seguir avanzando en la línea de la excelencia turística”.
No se trata solo de llenar los hoteles de Mojácar o Roquetas en agosto, sino de fomentar experiencias que lleven al visitante a conocer Níjar, Sorbas, Vélez-Blanco o cualquier otro municipio con atractivos propios y diferenciales.
Condiciones sociales, medioambientales y técnicas
La memoria también introduce condiciones específicas de ejecución: el contratista deberá hacer un uso no sexista del lenguaje, evitar imágenes discriminatorias en su publicidad y entregar toda la documentación en formato electrónico. El incumplimiento de estos requisitos se sancionará con un 3% del importe adjudicado.
Para optar al contrato, las empresas deberán demostrar solvencia económica y experiencia en campañas similares. Y si se trata de empresas de nueva creación, se les exigirá disponer de personal con formación en turismo o publicidad.
El precio de 2,5 euros por turista puede parecer simbólico, pero solo si se cumplen todos los objetivos. En caso contrario, el coste para las arcas públicas puede ser mayor, sin garantía de retorno.
Lo que es indudable es que la Diputación ha puesto toda la carne en el asador para traer británicos a Almería. Ahora falta saber qué empresa será la adjudicataria y, sobre todo, si logrará que 30.000 turistas se enamoren de nuestra costa, de nuestro interior… y que, ya de paso, vuelvan el año siguiente.
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