El parkour es una disciplina entre lo artístico y lo deportivo que hace furor entre los jóvenes almerienses que ocupan plazas y calles de Almería, Roquetas de Mar, Huércal, Berja.. con saltos imposibles y acrobacias que van entre el atletismo y el circo
Es sábado y en el Anfiteatro de la Rambla García Lorca se reunen casi dos centenares de chavales de las edades más diversas convocados vía whatsapp, y tras una breve charla ofrecida por tres jóvenes, se ponen a hacer un calentamiento deportivo, y luego... luego... pues... hay que verlo.
Se trata de parkour, una modalidad de deporte urbano, de origen francés, que es definida por su creador, David Belle, como “l'art du déplacement” o “el arte del desplazamiento”, y que el almeriense Alejandro Segura, uno de los promotores de el grupo Línea Recta, concreta señalando que es “moverse de un punto A a un punto B de la forma más rápida y eficiente posible sin hacer acrobacias de por medio”. También es él quien dos veces al año -una en Almería y otra en Roquetas de Mar- convoca una RT (reunión de “traceurs” que es como se llama a los practicantes de esta disciplina), a lo que se suman los “talleres de parkour” que organiza la asociación ALMfamily, y del que ya se han desarrollado algunos municipios de la provincia, gratis y abiertos.
Dispuestos a superar obstáculos por sus propios medios, han llegado a esta RT de casi toda la provincia de Almería, de Melilla, Málaga, Jaén, Valencia, Alicante, Madrid, Sevilla... suben las gradas del Anfiteatro sin ayudarse de las manos, las bajan dando saltos, o se dejan caer por muros de varios metros de altura. Llama la atención el “buen rollo” con el que se desenvuelve toda la actividad que dura aproximadamente tres horas, y en la que no faltan las exhibiciones acrobáticas.
Segura aclara que es un error considerar los saltos sobre boyas -algo que se ha puesto muy de moda estos últimos veranos en las playas- o los mortales son parkour. Insiste en que se busca la sencillez en el desplazamiento.
Aunque parece inevitable que lo uno lleve a lo otro, y en estos encuentros es fácil ver saltos propios de avezados atletas o de acróbatas de circo. Así, en el parque infantil de la Rambla un traceur corre hacia un muro de un metro de altura, con un pié sobre él se impulsa para poner el otro sobre una farola, al tiempo que gira en horizontal sobre si mismo, y cae sobre otro muro en perfecto equilibrio.
Unos se afanan en subir paredes de más de tres metros de altura, y otros en hacer saltos de longitud de un punto a otro, a ser posible cada vez más alejado y más pequeño, pero siempre para caer de pie. Según el convocante de la “quedada” el riesgo físico de los saltos se ve reducido por los años de entrenamiento para realizarlos, y que si quisiera hacer lo que hace ahora sin preparación “estaría más que lesionado”.
Alejandro aclara que el parkour “no es competición” y que si un momento dado se convierte en eso, habrá muerto. Señala que es un reto con uno mismo y sus propias capacidades, no con los demás. De hecho, estos encuentros son sucesiones de saltos y de recorridos en los que cada cual aporta su experiencia y conocimiento, sugiriendo a los demás la mejor postura, el punto donde hacer el apoyo, como controlar una caída. Se dan la mano, se ayudan, aprenden entre todos.
Una anciana llama alarmada a la Policía con el móvil. “¡Vengan rápido! ¡hay unos niños dando saltos y lo van a romper todo y se van a matar!”. Las otras tres personas que comparten banco con ella permanecen callados y observando. Pero no pasa nada, ni viene la Policía, ni se mata ningún chaval, ni se rompe nada.
Alejandro reconoce que el mobiliario urbano sufre las consecuencias de su actividad. Niega que esto que hacen sea “vandalismo” y asegura que ellos son los primeros interesados en no destrozar nada, por lo que les gustaría contar con un lugar donde hacer parkour, como ya existe en otras ciudades españolas.
Hace siete años que comenzó a practicar esta actividad que entonces era una gran desconocida y eso es lo que le anima a promoverla. Las RT y los talleres son gratuitos (en ellos también les hablan de temas de salud), no hay que apuntarse en ningún sitio, sólo hay que tener ganas de aprender. Las redes sociales hacen el resto.
A la docena de miembros de Línea Recta se les puede calificar sin duda de emprendedores. No sólo por iniciar una actividad como el parkour en 2007 y promoverla como están haciendo, si no también por haber creado su línea de ropa, que puede ser comprada por internet, y cuyo éxito es patente en cada encuentro, donde muchos de los chavales visten sus camisetas o lucen sus pulseras.
VOCABULARIO PARKOUR
Recepciones:
•Recepción de un salto de fondo
•Rotación
•Recepción de un salto de precisión
•Recepción de salto de brazo
•Recepción en balanceo
Desplaces:
•Pasavallas
•Gato
•Reverso
•Rompemuñecas
•Underbar
•Ladrón/Lateral
Salto •Salto de precisión
•Distensión
•Salto de brazo
•Salto de longitud
•Salto de fondo
•Salto del ángel o león
Otros
•Pasa-murallas/Grimpeo
•Plancha
•180
•Liberado
•Tic-Tac
•Return
•Laché
•salto de ángel
Parkour: proviene de "parcours" que significa "recorrido" en francés. "Les parcours du combattant "son recorridos de obstáculos para entrenamiento de militares y en algunos casos para los bomberos, también conocido como un arte marcial o también como deporte.
PK: abreviación de "parkour".
Traceur: practicante de Parkour. Significa "trazador" o "el que hace el camino". El término es ambiguo para ambos géneros. Cabe decir que era el nombre de uno de los primeros grupos de practicantes y desde ahí se ha utilizado siendo la palabra que define al practicante de Parkour.
RT: "reunión de traceurs (o traceuses)". Son quedadas que hacen los practicantes de parkour para entrenar juntos. A veces incluso viajan personas a otros países.
EC: "Entrenamiento Colectivo". Es un entrenamiento de practicantes común pero con unos objetivos y unas pautas establecidas.
Add: "Art du deplacement" (arte del desplazamiento). Nombre que le dio el grupo Yamakasi a esta disciplina.
Ser y durar: Del francés: Être et durer, es el lema del parkour. Este lema deriva del lema del método natural "Être forte pour être utile" que significa "Ser fuerte para ser útil".
FreeRunning: Nombre que dio Sébastien Foucan para denominar el Parkour en el Reino Unido, aunque luego se utilizó el nombre para denominar una disciplina cuyo objetivo radica en buscar la belleza del movimiento.