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Gracias por Almería 2005

Por Luis Rogelio Rodríguez
martes 10 de noviembre de 2015, 21:38h

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DISCURSO DEL ALCALDE DE ALMERÍA CON MOTIVO DEL DÉCIMO ANIVERSARIO DE LOS JUEGOS MEDITERRÁNEOS DE 2005

Una provincia como Almería, con una historia tan rica y con unas raíces tan antiguas, tiene numerosos e importantes hechos y procesos históricos que recordar, conmemorar y estudiar. Y sin duda, la conmemoración del décimo aniversario de la celebración de la XV edición de los Juegos Mediterráneos es uno de ellos.

Pero en mi opinión, lo más importante de las conmemoraciones, además de ayudarnos a conocer nuestro propio transcurso histórico y a comprender mejor las múltiples claves de nuestra identidad colectiva, es que, a partir del recuerdo sepamos extraer las conclusiones adecuadas para construir un presente y un futuro mejor para todos.

Pero sobre todo, esta es una jornada para la gratitud.

Gratitud hacia nuestros galardonados, por su esfuerzo y su entusiasmo por el proyecto cuyo recuerdo nos reúne esta noche.
Y gratitud también hacia quienes con su generosidad hicieron posible la más completa y reconocida edición de los Juegos Mediterráneos: trabajadores municipales de la sede y subsedes, personal del COJMA, y muy especialmente, a los cientos de voluntarios que mostraron la faceta más cercana y más solidaria del empeño colectivo por hacer en Almería los mejores Juegos Mediterráneos de la historia.

A cada uno de los galardonados, quiero darles mi enhorabuena más sincera y dedicarles ahora mis palabras.

VICENTE AÑÓ trabajó con la lucidez e inteligencia de quien fue plenamente consciente en todo momento de que su labor como Consejero Delegado podía y debía mejorar la calidad de esa edición de los Juegos.
No fue ajena a esta actitud su vocación deportiva, y su convicción de que la práctica del deporte es una actitud individual que tiene beneficios colectivos. Todo ello se tradujo en una labor que, más allá de esta noche, ha sido reconocida y aplaudida con merecimiento en numerosas ocasiones a lo largo de estos diez años.
Por todo ello, querido Vicente, muchas gracias y enhorabuena.

A JUAN MEGINO debemos agradecerle también su contribución decisiva a estos Juegos no sólo durante su celebración, sino también durante su etapa como Alcalde de Almería, antes de 2005.
Una labor de impulso municipal la que es justo reconocer también las aportaciones de otros alcaldes como Fernando Martínez y Santiago Martínez Cabrejas.
Juan Megino, como Presidente del Comité Organizador, supo analizar y diagnosticar con pleno acierto las necesidades de una competición que iban a reportar para Almería todo un tratamiento de crecimiento, promoción y desarrollo de la calidad de vida de todos los almerienses.
Gracias a su vocación y a su compromiso, los Juegos Mediterráneos de 2005 siguen siendo a día de hoy uno de nuestros mejores momentos como Ciudad.
Por todo ello, querido Juan, muchas gracias y enhorabuena.

Del mismo modo, agradecemos al presidente del Comité Internacional de los Juegos Mediterráneos, mi querido amigo AMAR ADDADI, la experiencia única e irrepetible que nos proporcionó recibir la confianza de dicho Comité para que Almería fuera finalmente elegida como ciudad sede de la XV Edición de los Juegos Mediterráneos.

Amar cuenta ya con el Escudo de Oro de Almería, pero nos parecía justo destacar esta noche la validez y la impronta de su paso por Almería 2005.

Que Almería asumiera ese reto, superase todas las dificultades y lograse la unidad de acción como ciudad posibilitó que el recordado lema “JUNTOS PODEMOS” se convirtiese en una inteligente demostración de compromiso colectivo.

Finalmente, no quiero dejar de mencionar y reconocer la labor de LOS VOLUNTARIOS al cumplirse el décimo aniversario de su aportación a los Juegos. Para estos almerienses a los que hoy estamos dando las gracias, no se trataba tanto de qué es lo que los Juegos podrían hacer por ellos, sino qué podrían hacer ellos por los Juegos.
Y hoy, una vez más, en nombre de Almería, quiero dedicaros la palabra que mejor responde vuestro trabajo, vuestra solidaridad, vuestro esfuerzo y vuestro amor por Almería: GRACIAS. Gracias antes, gracias ahora y gracias siempre.

Ser voluntario, y disculpad la obviedad, nace de la voluntad de no esperar nada a cambio. Y la voluntad también es responsabilidad, cariño, afición, voluntad y afecto. Pero sobre todo, ser voluntario es ser ciudadano en primera persona.

En los Juegos participaron 21 países, que compitieron en 25 disciplinas deportivas. Los voluntarios estuvieron colaborando, antes y durante los Juegos, en todas las áreas y deportes, en las oficinas y en las pistas, en la organización y junto a los deportistas, mañana, tarde y noche. Los voluntarios fueron, en definitiva, uno de los pilares que sustentaron los Juegos.


Señoras y señores:
Está llegando a su fin esta ceremonia de homenaje a la ejemplaridad de aquella inolvidable edición de los Juegos Mediterráneos.
Pero no quisiera clausurar este acto sin afirmar que son tiempos de mirar hacia el futuro con esperanza y con responsabilidad. Tiempos, en definitiva, para la convivencia.
Afrontar el futuro requiere siempre el compromiso de todos y un espíritu de colaboración compartido. Lo que valió para organizar y celebrar los mejores Juegos Mediterráneos de la historia debe servirnos a los almerienses para encarar el futuro.

Almería necesita promover y alentar una conciencia social que valore lo mucho que tenemos de positivo, que reconozca nuestras capacidades y fortalezas, potencie nuestra autoestima, y nos ayude a proyectar una buena imagen de nuestro ciudad y nuestra provincia; un espíritu que alimente, en definitiva, la esperanza del conjunto de los almerienses.
Hoy, aquí mismo, hemos recordado los ejemplos de generosidad, esfuerzo y excelencia que representan nuestros premiados. Son valores que dignifican a las personas y a sus obras. Son valores permanentes para nuestra sociedad y que yo, ahora, les animo a mantener y preservar para siempre.


Muchas gracias.