28F: ¡Pero si perdimos!
lunes 26 de febrero de 2018, 11:18h
Add to Flipboard Magazine.
En estos días de tanta agitación propagandística en las redes sociales sobre el 28F, en estos días en los que el PSOEguiónA aprovecha para seguir mimetizándose con la consecución de la autonomía de Andalucía, no logro que nadie me responda a una sencillas preguntas que les transmito, y que en el mejor de los casos –en el de contestarme- solo me insultan de modo directo o indirecto, colocándome –casi- como un enemigo.
La primera pregunta es si el PSOE prefería el artículo 143 o el 151 para la autonomía andaluza, y la respuesta la daba Alfonso Guerra (ya saben, el que le puso un despacho a su hermano en la Delegación del Gobierno de Sevilla sin tener cargo alguno, o el que usaba un avión militar para ir a los toros) el 17 de noviembre de 1979 en El Correo de Andalucía. Según él era “falso” que hubiera diferencia competencial entre ambos artículos de la Constitución, aunque lo cierto es que sí, que una era autonomía política y la otra una mera descentralización administrativa.
El socialista José Rodríguez de la Borbolla –quien fuera presidente- aseguraba también que “ponemos nuestra meta en el contenido del estatuto, no en el procedimiento”, por lo que le daba igual una cosa que la otra. Y lo mismo pasa con el también socialista Rafael Escuredo, su antecesor, quien en la prensa de la época y por referencia directa también de Manuel Clavero Arévalo, tenía la intención de seguir con el proceso autonómico por el 143 tras el “fracaso” del 151.
Pues está claro: al PSOE le daba igual el 151 que el 143… aunque ahora quieran contarnos que ellos fueron los artífices del proceso autonómico por la vía rápida, la de las nacionalidades… aunque ellos la sigan llamando “región” tanto en los órganos de su formación como a nivel institucional, y eso que no los somos ni por la vía de acceso ni por la definición de nuestros dos estatutos.
Tampoco me responden a la pregunta de quién pactó el referéndum y sus condiciones. Con lo fácil que es… y lo que debe doler saberlo. Será eso.
Fue el PSOE y la UCD quienes pactaron ¡el Día de los Inocentes de 1979! las condiciones del referéndum del 28F, cambiando las reglas a las que se habían sometido en Cataluña y País Vasco.
¿Por qué razón a Andalucía no se le aplicaron las normas que sí se usaron en esos dos territorios, y se impuso que los síes debían ser mayoría absoluta sobre el censo electoral, y no sencillamente que hubiera más síes que noes, y por qué el resultado debía ser así en cada provincia y no a circunscripción única, con el riesgo político e institucional que podría suponer que unos territorios superaran la cifra y otros no?
Insistimos, porque como parece que hay mucho olvido, repitámoslo: fue el PSOE con el extinta UCD quienes acordaron que Andalucía tenía que tener un referéndum que hiciera prácticamente imposible nuestro acceso a la autonomía por el 151, como una nacionalidad histórica (recordemos también aquí, que en ese momento se calificaba de este modo a aquellas que tuvieron autonomía durante la República, y si bien Cataluña la logró así, y los vascos lo hicieron durante la Guerra Civil, el Estatuto Andaluz tenía que entrar en las Cortes dos meses después de iniciada la contienda, y no parece razonable que con ese detalle se nos quisiera arrebatar nuestro derecho histórico).
Lo más sorprendente de todo, es que a día de hoy seguimos escuchando una y otra vez que los andaluces ganamos nuestra autonomía aquel 28 de Febrero y eso es… falso, es mentira… perdimos el referéndum.
Lo cierto es que los andaluces le dimos una lección buena al Estado español –entendido como tal, pero también como “España”- porque protagonizamos un 4 de Diciembre en 1977 que nadie esperaba, ni que ocurriera, ni que respondiéramos de tal modo. Pero luego, cuando se hizo aquel referéndum inaceptable, porque llenamos las urnas de síes, porque si les obligamos a que la Constitución incluyera la posibilidad de la acceder al 151 para quienes estábamos condenados al 143, luego, tras el resultado, tuvieron que tragar y volver a cambiar sus propias condiciones ante nuestra respuesta.
Andalucía perdió el referéndum realizado con las condiciones impuestas por el PSOE, unas condiciones que no se exigió a otros pueblos del Estado, y que hubiera dejado a Cataluña sin autonomía por culpa de Tarragona, o en la II República a Euskadi por culpa de Álava.
En el referéndum votaron casi tres millones de andaluces, más del 64% del censo… un censo plagado de errores y que el PSOE también se negó a expurgar en una tierra carcomida por la emigración (solo Almería tenía en aquellas fechas la misma cantidad de habitantes en ella, que fuera de ella). De esos, el 86,87 dijo a sí a la pregunta de marras… también pactada entre PSOE y UCD y que –espero que se entienda la ironía- era fácilmente comprensible en una Andalucía hundida en el analfabetismo “¿Da usted su acuerdo a la ratificación de la iniciativa prevista en el artículo ciento cincuenta y uno de la Constitución a efectos de la tramitación por el procedimiento establecido en dicho artículo?”… ¡¡¡pero si es que hasta el número lo pusieron en letra para dificultar su entendimiento!!!
Solo Almería no cumplió la exigencia del referéndum, aunque los síes sobre el censo fueron del 43%, y sobre el voto emitido, del 83%. Y por cierto, que eso fue lo que se preguntó, y no otra cosa… lo digo por quienes a día de hoy cuentan que los almerienses dijeron no a “ser” andaluces o a “estar” en Andalucía… ni lo uno ni lo otro, ni lo otro: los almerienses que dijeron Sí fueron diez veces más que los que dijeron No, y lo que hicieron fue contestar a esta pregunta, tanto unos, como otros.
Pero lo cierto es que con la Ley la mano, al no superar Almería el listón, Andalucía entera se quedaba sin autonomía por la vía del 151… lo que ya hemos visto que al PSOE le daba igual.
Claro que había un problema, y es que dos millones y medio de andaluces querían la autonomía por la vía de las nacionalidades históricas, frente a menos de 153.000 que dijeron que no.
Sinceramente, no logro comprender cómo puede el PSOE sacar pecho cada 28 de Febrero, y decir las cosas que dice, cuando fueron ellos los que intentaron con todas sus fuerzas que Andalucía no tuviera autonomía como las del norte, primero negándola, luego dificultándola, para finalmente acabar gobernándola 40 años…
Este recorrido histórico no hubiese sido necesario hacerlo, si el PSOE fuera un poco más modesto en su autobombo cada 28F, si enseñara la verdad en los colegios, si los periodistas de los medios públicos conocieran qué pasó, si los libros que editan sus fundaciones contaran las cosas como son… y si la propia Susana Díaz hubiese dedicado algo más de tiempo a conocer las cosas de la “nacionalidad” que preside… porque quiero pensar que cuando dice cosas que no son ciertas, lo hace por ignorancia, no con la intención de mentir y manipular.
Editor de Noticias de Almería
Periodista.
Autor de "No les va a gustar", "Palomares en los papeles secretos EEUU", "Bandera de la infamia", "Más allá del cementerio azul", "Covid19: Diario del confinamiento" y la novela "Todo por la patria"
|
directornoticiasdealmeriacom/8/8/26
|