El Ayuntamiento de Almería ha dado su aprobación, en Junta de Gobierno Local extraordinaria celebrada esta semana, a la inclusión en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible de la Ciudad de Almería (PMUS), aprobado en junio de 2015, de medidas que permitan reducir las emisiones derivadas de la movilidad, entre ellas el establecimiento de una Zona de Bajas Emisiones (ZBE), en cumplimiento de lo dispuesto en el artículo 14 de la 7/2021, 20 mayo, de cambio climático y transición energética.
A la voluntad expresa de incluir estas medidas en el marco del PMUS se suma el inicio del proceso participativo previsto en el artículo 101.5 la Ley 2/2011, de 4 de marzo, de Economía Sostenible, proceso que se va a desarrollar a través de jornadas participativas con los ciudadanos y agentes implicados en la movilidad urbana hasta el día 22 de diciembre de 2022.
Un trámite que sigue el Ayuntamiento para implantar, antes de que finalice 2023, la zona de bajas emisiones, en cumplimiento de la ley de Cambio Climático y Transición Energética 7/2021 de 20 de mayo, que establece que en el horizonte del 2023 todas las localidades de España cuya población sea superior a los 50.000 habitantes deben haber adoptado entre otras medidas el establecimiento de Zonas de Bajas Emisiones.
Así lo han informado, conjuntamente, la portavoz municipal, Ana Martínez Labella, acompañada de la concejala de Seguridad y Movilidad, María del Mar García Lorca, explicando que ya se han mantenido las primeras reuniones y jornadas informativas, con la participación de colectivos como ASHAL, Almería Centro, Asociaciones Vecinales y grupos políticos para informar del contenido del establecimiento de esa Zona de Bajas Emisiones realizado de acuerdo a los estudios de campo y el resultado de los informes realizados por la empresa encargada de este trabajo, la empresa ‘Doymo’.
La concejala de Seguridad y Movilidad ha explicado que “el desarrollo de esta obligación que marca el Gobierno, que ahora tendrá que dotarse de una ordenanza, abierta y participativa que aporte seguridad jurídica entre usuarios, empresas y ciudadanía en general, ha estado en todo momento muy encorsetada por parte del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico”, ha criticado.
La ZBE queda delimitada, de acuerdo a los estudios realizados, en un polígono limitado entre otras vías por Paseo de San Luis, calle La Reina, Calle Fernández en paralelo al Conjunto Monumental de La Alcazaba, Chamberí, Camino Barranco, Palomas, calle Valdivia, calle Capitana hasta la Plaza Anzuelo, Callejón Canteras Viejas, Cuesta del Muelle desembocando hasta Carretera de Málaga y en paralelo al Parque Nicolás Salmerón.
“En el caso de Almería, llevamos la definición de este espacio, conforme a los estudios que se han realizado, sabiendo que la ciudad, en todo su conjunto es una zona de bajas emisiones”, ha indicado García Lorca, una “singularidad” que, a su juicio y procurada de una movilidad “segura, saludable y sostenible”, en ningún caso compartará restricciones y si una regularización y gestión del tráfico en la zona delimitada, “siempre y en el caso de producirse algún episodio perjudicial en términos medioambientales, activando con ello un protocolo”, ha explicado.
María del Mar García Lorca ha matizado que “la delimitación de este ámbito supone una herramienta más que podremos regular en función de las condiciones medioambientales. Podrá ser de forma temporal, por horas, por días... No tiene que ser un espacio cerrado, porque nuestra peculiaridad así nos los permite. Simplemente incorporamos al PMUS de ese espacio que, en principio, se considera como ZBE. Digo en principio porque, en la línea de los trabajos y proyectos en los que estamos trabajando (sensores de control del aire, cámaras de control de tráfico...) dispondremos de información, a tiempo real, de esas condiciones y condicionantes, que nos permitirá ir tomando decisiones”.
El documento ahora en exposición pública deberá pasar el trámite de aprobación en Pleno, antes de final de año, si bien la portavoz municipal ha respondido a algunas de las preguntas que la obligación de la delimitación de Zona de Bajas Emisiones sugiere. “Cumpliendo este requisito que nos obliga el Gobierno, como es la delimitación del ámbito, a partír de ahí, ¿afecta en algo al ciudadano en el momento que se apruebe? No. ¿Va a tener que cambiar de vehículo? No. ¿Va a tener que poner alguna etiqueta en su vehículo? No. ¿Va a sufrir alguna restricción? No”.