La Asociación Almeriense para el Síndrome de Down (Asalsido) ha vivido un momento muy especial con la jubilación de Francisco Navarro, su gerente durante los últimos 25 años y una de las figuras clave en la evolución de la entidad. Vinculado a la asociación desde hace tres décadas, Paco —como todos lo conocen— ha sido testigo y motor del enorme crecimiento de Asalsido desde sus inicios. “Cuando yo entré había dos personas contratadas a tiempo parcial y compartíamos una habitación en el piso donde hoy viven algunos de los chicos. Ahora tenemos este edificio, estamos construyendo otro, los servicios se han multiplicado y atendemos a muchas más personas. Todo esto ha sido posible gracias a muchísima gente: trabajadores, compañeros y una junta directiva implicada que se ha dejado la piel. Hemos crecido poquito a poco, pero sin parar”, comenta Navarro, quien reconoce que no se va a desvincular de la asociación y que echará “una mano a ratitos”.
Durante su etapa como gerente, Asalsido se ha consolidado como un referente en la atención a personas con síndrome de Down y discapacidad intelectual. Uno de los hitos más importantes de su gestión es el Residencial 21, un proyecto que simboliza el futuro y la tranquilidad de las familias. “Para los padres que tenemos hijos con síndrome de Down, el Residencial 21 es la tranquilidad de saber que ese será su hogar, donde vivirán con sus amigos y con la máxima calidad posible. Es el lugar que nos permite marcharnos sabiendo que su futuro está resuelto”, explica, a la par que recuerda que en la asociación “no pensábamos que esto fuera a suceder en tan poco tiempo”.
Con su habitual franqueza, Francisco Navarro ha realizado también un balance de la situación actual de recursos con los que cuentan las personas con síndrome de Down y discapacidad intelectual: “Se pelea mucho para conseguir cosas pequeñas, y muchas de ellas deberían estar ya establecidas por parte de la Administración. La atención al colectivo no debería suponer tanta lucha para lograr una subvención. Las administraciones deben repartir menos limosnas y dar más prestaciones dignas, porque es relativamente fácil cuantificar las necesidades de un colectivo”. Navarro lamenta que, pese a los avances, en los últimos años se ha producido un deterioro de los servicios públicos que afecta a todos, pero especialmente a las personas más vulnerables. “Estamos viendo cómo la educación, la sanidad y el acceso a la vivienda retroceden. ¿Hacia qué mundo vamos? ¿Qué nos depara el futuro?”, se pregunta.
En su despedida, Paco también quiso mirar hacia el futuro de la propia asociación, haciendo un llamamiento a la implicación de nuevas generaciones. “Necesitamos que entren padres más jóvenes en la junta directiva con una visión de futuro y unas expectativas más largas, porque esto no para. Sin una junta que participe, esto no funciona. En muchas ocasiones se toman decisiones críticas, y su implicación es decisiva para que todo siga avanzando”, asevera.
Por su parte, la presidenta de Asalsido, Isabel Parras, destaca que “Paco ha sido un pilar fundamental para que la asociación haya avanzado hasta el nivel en el que hoy está, situándonos como un referente nacional en la atención a personas con síndrome de Down. Gracias a su buen hacer y a lo bien que ha llevado la gestión y las cuentas, hemos salido de momentos duros para todas las asociaciones y, sin embargo, se ha sabido gestionar muy bien junto con el equipo que le ha acompañado”.
La presidenta subraya además que el exgerente “ha sabido mantener el equilibrio entre la visión empresarial y la esencia asociativa, algo que ha sido clave para el buen funcionamiento de la entidad. Es importante que las cuentas estén saneadas y el rendimiento sea bueno para poder ofrecer el mejor servicio a nuestros socios de la forma más económica”, añade Parras.
Con la marcha de Francisco Navarro, Asalsido despide a un gerente que ha dejado una profunda huella y da la bienvenida a una nueva etapa de continuidad y compromiso, en la que la entidad seguirá trabajando por la plena inclusión y la mejora de la calidad de vida de las personas con síndrome de Down y discapacidad intelectual en Almería.
Pedro Gómez, nuevo gerente
El relevo al frente de la gerencia recae en Pedro Gómez, licenciado en Economía por la Universidad de Almería, padre de una persona con síndrome de Down y miembro de la junta directiva de Asalsido durante más de 20 años. Tras ejercer como tesorero y formar parte de la dirección de la entidad durante el último año, asume ahora esta nueva etapa “con la ilusión de un padre que quiere ver cómo sigue evolucionando la asociación. Me considero trabajador, pero ante todo soy padre, y esa vinculación emocional es lo que da sentido a mi compromiso”, asegura.
Respecto a su sucesor, Francisco Navarro confía plenamente en su trabajo. “Pedro tiene la cualificación y, sobre todo, la motivación personal necesaria para hacer este trabajo con cariño. Sé que la asociación queda en buenas manos”.
Sobre este relevo, la presidenta también ha querido destacar la figura del nuevo gerente. “Pedro ha estado durante años muy cercano a Paco y su implicación en la junta directiva hace que tenga un conocimiento muy profundo de la asociación y pueda darle continuidad a todos los proyectos iniciados. Confiamos muchísimo en él”.
Tanto Paco como Pedro cuentan con “un plus en el desarrollo de su trabajo, y es que ambos tienen hijos con síndrome de Down. Esta circunstancia transmite a la junta directiva una mayor confianza, ya que apuestan por el colectivo desde su propia experiencia personal y compromiso diario”, concluye Isabel Parras.