A los que pensaban que con el desenterramiento de Franco en el Valle de los Caídos, la apertura de nuevas fosas de la Guerra Civil o el ninguneo de los muertos del bando nacional antes y durante la misma, este Gobierno se iba a conformar, ya les dijimos en múltiples ocasiones que fueran dejando el consumo habitual de bebidas espirituosas.
Estamos, yo creo que ya ha pasado suficiente tiempo y más cosas de las necesarias para darnos cuenta todos, ante un gobierno de una ineptitud tan sólo comparable a la del de José Luis Rodríguez Zapatero, sólo que aquí cambiamos a las Leires Pajínes, las Bibianas Aídos y las Marías Teresas Fernández de las Vegas por las Montero, Irenes y ‘Marisú’, junto a una pléyade de desconocidos sobre cuya labor no tenemos ni puñetera idea, más allá de que se levantan más de 10.000 del ala cada mes casi sin pestañear.
Y claro, con ese nivel y gobernando tras un pacto que se renueva día a día con los herederos de quienes les pegaban tiros en la nuca y les ponían bombas debajo de los coches a ellos mismos, a los propios socialistas de bien de los 80, así como con los independentistas catalanes y vascos y con los comunistas que fueron los principales causantes de su propia ruina durante la Segunda República, es normal que quieran explotar la desviación de la atención hacia los años 30 del siglo pasado hasta que la cosa huela a ajo.
Con 53.000 muertos confirmados por las estadísticas, pero anclados en los 40.000 según las cifras del gobierno, el mundo entero hablando de España como la peor gestión sanitaria y económica de la crisis y con el gobierno desgobernando y sin hacer nada en lo relativo al principal problema de los españoles que el virus del Covid y el de la economía, para los hombres de Pedro I El Falso en lo que hay que ocupar ahora tiempo, esfuerzo y dinero de todos es en la muy mal llamada memoria histórica.
Carmen Calva, no se molestará si le cambio el género de su apellido ya que ella lo hace con las palabras que le da la gana, que cada día se supera en su ardua labor de confirmar que uno de los peores ceros a la izquierda que ha dado al política española, que va a jubilarse viviendo toda la vida de la política sin haber aportado absolutamente nada al país que le ha regalado su sueldo década tras década, dice que ahora, ya con Franco exhumado, lo importante es sacar del Valle de los Caídos a los benedictinos, que nadie sabe qué mal han hecho estando ahí, convertirlo en un cementerio civil, que la verdad, me importa tres pepinos lo que hagan ahí, y sobre todo, ayudar a que nuestros niños conozcan nuestra historia.
Mira, Calva, en esto último es en lo único que estamos de acuerdo. Porque desde hace 40 años, los historiadores que habéis formado en tu partido, entre ellos más de un catedrático de la Universidad de Almería, para que reescriban la historia y la conviertan en una historia de buenos y malos, olvidando las burradas que hizo la izquierda y exagerando las que hay que adjudicarle a la derecha, no han dejado de manipular a los alumnos que han pasado por las aulas, gracias a la primera reforma educativa de Felipe González.
Eso sí, ten por seguro que quienes tenemos interés en que se conozca la historia, pero la de verdad y no la absolutamente politizada que tú construyes con tu ejército de historiadores a sueldo y de carné, no vamos a tolerar que a nuestros niños les llenéis la cabeza de más mentiras de las que ya les habéis inyectado en estas cuatro décadas.
Cuando quieras, Calva, nos vemos y discutimos de política. Ya te advierto que me pondré otra cita diez minutos después de la tuya porque, debatiendo sobre historia, no creo que aguantes siquiera ese tiempo.
Ah, y por cierto: a mí Franco, más allá de que llevó a cabo sensacionales gestiones en su mandato, me parece un dictador cruel y condenable, pero no tengas duda de que seguiré resaltando sus valores positivos y ahora que tú y tus totalitarios lo queréis impedir… con la fuerza con la que nunca los he defendido.