Llevamos un tiempo con la mosca del mosquito del Nilo tras la oreja. La amenaza ha surgido de vez en cuando. Que llega el mosquito del Nilo, que hay un avistamiento en lontananza, que te pica, que te pica. Durante un tiempo nos hemos estado tomando un poco a cuchufleta lo de virus del Nilo. Todos han sido conatos, incidentes nos probados, comentarios de prensa. Nos parecía que estábamos lejos del caudaloso río Nilo y que el mosquito no llegaría a esta zona. Un caballo, se ha comentado duranta las semanas pasadas, parece ser el primer caso serio del que se tiene noticia, con la llegada del otoño y el cambio de temperatura, el peligro parece alejarse, dicen los especialistas, pero no estamos libre de que el maldito mosquito ande en el entorno de nuestras vidas. ¿Debemos preocuparnos de ellos? De las noticias de la Oms ya no nos fiamos en exceso, de las patrañas de los políticos andamos por el mismo camino. Tiene uno la impresión de que les encanta tenernos asustados, en vilo, pendientes de ellos como los grandes salvadores de nuestras vidas y haciendas.
Tras el mosquito, llega el dragón. Ya el solo nombre asusta. No es un mosquito, hablamos de un dragón y venenoso. La mítica serie Juego de Tronos nos trajo al dragón como elemento de fuego y destrucción. Atrás quedaron películas como enseñar a un dragón, que nos presentaba al monstruo como algo con el que jugar a las maquinitas si hacía falta. A este encima le han puesto color, el azul, y aunque el mismo nos recuerde las hermosas tardes mirando el cielo de nuestra provincia, lo que de él se dice es bastante más grave que la picadura del mosquito. El veneno está más presente en su cuerpo, y los ayuntamientos de la costa, comenzado por el Levante almeriense, están cerrando playas y poniendo en alerta a los bañistas ante el peligro del dragón azul.
La culpa, a alguien hay que echarle la culpa de la presencia del mosquito y del dragón en nuestras tierras y aguas. Estén seguros que si le preguntan a algún miembro del gobierno, comenzando con su presidente, la tiene el cambio climático. El puñetero cambio climático. A partir de este momento ese cambio va a ser el culpable de todo lo que ocurra en España. Creo que la falta de presupuestos de Pedro es culpa del cambio climático, como lo es de la corrupción, del puesto de trabajo que le dieron a su hermano, y hasta la politización de los jueces también es del cambio de las temperaturas. Las altas temperaturas que hemos vivido durante los meses de julio y agosto por culpa del cambio han traído mosquitos y dragones. Anoche me picó uno, memos mal que fue un mosquito (si llega a ser el dragón se libran de mí), y tras más de media hora de picor insoportable estuve a punto de ir a urgencias. Mira que si es el del Nilo. Voy a tener que dejar de ir a la piscina del pueblo, si el dragón ha llegado a las playas, quién te dice que no lo hace en las piscinas. Se acabaron los baños, me paso a las duchas. No se hagan los valientes, entre mosquitos, dragones y políticos, el veneno está asegurado.
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