El PP de Almería se autoescalda

Tras la finalización del pleno extraordinario celebrado la mañana del viernes 13 en la Diputación de Almería, su presidente Gabriel Amat murmuraba: “que busquen, que busquen, que más de uno saldrá escaldado” mientras abandonaba el salón de plenos cual gato que huye del agua caliente.

Lo decía murmurando, pero no autorizaba a que se dijera en una comisión de investigación, en la que se vería claramente como las obras adjudicadas a Hispano Almería desde que el está en Diputación se acerca o supera ya el montante económico que alcanzó en el periodo de Luis Rogelio, el alcalde ausente, en otros tiempos regidor de la Administración supra-municipal.

Izquierda Unida ha demostrado que las adjudicaciones a la empresa Hispano Almería en Diputación son como una ola que sube y baja, subiendo siempre cuando gobierna el Partido Popular. Por eso no dudamos que Amat se refería a su compañero Luis Rogelio, cuando hacía mención a posibles escaldados y entendemos ahora por qué lo situó en el ‘Rincón de la Sombra’ el Día de la provincia celebrado en Carboneras. Y también entendemos el empeño en no crear esa Comisión que podría investigar y emitir dictámenes, dictámenes que podrían provocar quemaduras en sus propias filas.

No entendemos por qué les cuesta tanto aclarar políticamente asuntos como éste y se empeñan en que sean siempre los tribunales quienes actúen, y en este caso actuarán, confiando en que la lentitud de estos les salve. Es como si no comprendiesen que los políticos tienen que rendir cuentas ante quienes les votan y que en ocasiones aunque no exista nada ilegal, o haya caducado la ilegalidad, eso no implica que no sea inmoral o falto de ética.

Mientras tanto el agua ya esta hirviendo, ¿Qué gato caerá?