La transformación del entorno de La Hoya, a los pies de la Alcazaba de Almería, se alza con el Premio Nacional de Arquitectura en la categoría de Sostenibilidad y Salud, un reconocimiento que destaca la excelencia en la lectura del contexto histórico, paisajístico y social del espacio.
La ciudad de Almería se coloca en el mapa de la arquitectura española con la concesión del Premio Nacional de Arquitectura a la regeneración del entorno de La Hoya, conocido como 'Jardines Mediterráneos', un espacio de más de 42.000 metros cuadrados situado junto a la Alcazaba de Almería. El proyecto, ejecutado por una UTE formada por la empresa de construcción Jarquil y Grupo Copsa, a partir de un proyecto de Kauh Arquitectura y Paisajismo, promovido por el Ayuntamiento de Almería, ha sido reconocido en la categoría de Sostenibilidad y Salud.
El jurado del Premio Nacional de Arquitectura ha destacado "su excelencia en la lectura de su contexto histórico, paisajístico y social, por la sensibilidad y calidad en el manejo de su construcción, con recursos muy limitados en lo económico y por la capacidad de los autores en recuperar un espacio natural con una rica historia que había sufrido a lo largo de decenios un alto grado de degradación".
La transformación integral y ambiental-paisajística de este espacio ha sido posible gracias a la espectacular iluminación, sostenible y funcional, que cuenta con 235 balizas, 134 luminarias empotradas en barandillas y 59 bancos con iluminación, lo que supone el complemento perfecto para resaltar los valores históricos, culturales y arquitectónicos del conjunto.
Otro de los aspectos más notables del proyecto es el importante volumen vegetal presente en el mismo, con más de 21.000 unidades, pertenecientes a más de cien especies diferentes entre árboles, arbustos y plantas. Además, se han recuperado los antiguos sistemas de riego, basados en la comunicación entre albercas, que sirven como complemento del riego por goteo.
Este reconocimiento es un orgullo para la ciudad de Almería y un ejemplo de cómo la arquitectura y el urbanismo pueden trabajar juntos para crear espacios sostenibles y respetuosos con el entorno.