El conocido “Cristal de Hispania” fue utilizado como cristal de ventanas, piedra ornamental y diferentes prácticas, entre las que se incluirían los primeros invernaderos para cultivar frutas o verduras
El nido se ha trasladado a la Estación Biológica de Doñana hasta que nazcan las crías y se trasladen a un Centro de Gestión del Medio Marino de la Consejería de Medio Ambiente