La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), a través de su delegación provincial en Almería, ha denunciado un “notorio aumento” de las agresiones físicas a miembros de la Guardia Civil en la provincia, especialmente durante los meses de verano. La organización advierte de que los fallos judiciales recientes evidencian “lo barato que sale” agredir a un agente de la autoridad y reclama una reforma del Código Penal que endurezca las penas por este tipo de delitos.
En un comunicado, la AUGC señala que en los últimos diez días sus servicios jurídicos han prestado asistencia a cuatro guardias civiles agredidos en distintos incidentes. Los agentes, todos ellos afiliados a la asociación, sufrieron heridas de consideración, requirieron tratamiento médico y vieron afectados sus bienes materiales. Las indemnizaciones impuestas por los tribunales a los agresores suman algo más de 3.000 euros.
La letrada Marta Ortiz López, en representación de la AUGC, ejerció la acusación particular en los procedimientos, que se saldaron con condenas de prisión de cuatro meses para los acusados y la obligación de indemnizar a los agentes. No obstante, la asociación alerta de que, en muchos casos, la declaración de insolvencia de los condenados impide el cobro efectivo de las cantidades fijadas, trasladando al Estado el pago de esas indemnizaciones.
Para la AUGC, el problema radica no solo en la levedad de las penas, sino también en la falta de medios de protección. La organización reclama la dotación de dispositivos como pistolas táser o cámaras corporales que, a su juicio, permitirían prevenir situaciones de agresividad extrema y reforzar la seguridad de los agentes y de la ciudadanía. “El endurecimiento de las sanciones sería el camino para reducir estos comportamientos”, sostiene la asociación, que advierte de que la repetición de las agresiones es cada vez más probable si no se adoptan medidas.
La delegación de AUGC en Almería vincula esta situación a un marco normativo “obsoleto”, recordando que la Ley Orgánica 2/1986 de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado se aplica desde hace 39 años. “Vamos tarde en una nueva norma que regule de nuevo todo lo relativo a la seguridad pública en nuestro país, ya que hay nuevos retos y amenazas que antes no existían, como la pérdida del principio de autoridad”, apunta. La asociación lanza así una pregunta a modo de reflexión: “¿Quién defiende a los que nos defienden?”.
La AUGC es la asociación profesional decana y mayoritaria en la Guardia Civil. Con presencia en todo el territorio español y en todas las especialidades del cuerpo, nació en la Transición como un sindicato clandestino. Su defensa de la democratización de la institución le valió en 2010 el Premio Nacional de Derechos Humanos que concede la Asociación Pro Derechos Humanos de España.