Internacionalización para PYMES españolas: qué pasos debes dar
Las PYMES españolas tienen el reto, en muchos casos, de internacionalizarse para no depender tanto de los avatares de la economía local. En los últimos años, la mejora tecnológica ha permitido que, en algunos casos, sea posible operar en varios países, incluso para compañías de dimensiones muy reducidas.
Ahora bien, eso no implica falta de orden ni criterio en la internacionalización. Para ello, es importante realizar varios pasos que minimicen los riesgos. Son estos:
1. Elegir el mercado para la internacionalización de PYMES españolas
Parece obvio, pero esto lo tenemos que recordar: la elección del mercado es imprescindible. Puede ser uno o pueden ser varios, pero, antes de ver si hay posibilidades, se deben valorar cuáles serían las opciones preferentes. En ocasiones, las similitudes culturales o la integración económica o de tecnología son motivos determinantes.
Otro punto que debes valorar es si existen tecnologías de seguimiento, localización o pago, o dispositivos tecnológicos homologables; en esto Radius España puede ayudar a escala Europa. Al final, la Unión Europea tiende a funcionar como mercado único en los flujos de información y este es un elemento clave.
2. Realizar un análisis DAFO de potencialidades
Un primer filtro, aunque no el principal, para ver la viabilidad de la integración es la denominada matriz DAFO o FODA. Se utilizan las siglas de Debilidades internas, Amenazas externas, Fortalezas internas y Oportunidades externas. Esta es una fotografía de cómo está una empresa en un determinado momento y sirve, también, para la internacionalización.
No obstante, este análisis, por sí solo, es incompleto e insuficiente. Tengamos presente que el DAFO se utiliza, sobre todo, para comprobar la viabilidad de un proyecto empresarial. Por eso, se utiliza el denominado análisis PEST o PESTEL.
3. Hacer un análisis PEST
El análisis PEST o PESTEL es mucho más concreto y está centrado en el país en el que queremos internacionalizar la actividad. Aquí se tienen en cuenta los factores Políticos (gobernanza, instituciones), Económicos (coyuntura y estructura, paro, crecimiento), Sociales (estructura de población, religión, cultura) y Tecnológicos (desarrollo tecnológico, mejoras). Es imprescindible utilizar información de calidad que se pueda contrastar, incluso más allá de las cifras oficiales. Con toda esta información, podréis tomar la decisión de si la internacionalización es viable o no y, además, cuál es el mejor lugar.
Como ya hemos dicho antes, en las PYMES, es habitual que se tenga que optar en un primer momento entre varias opciones. Lo que hace este análisis es mostrar cuál puede interesar más. Los recursos son escasos siempre, pero con esta información será más fácil tomar una decisión racional y elegir el destino con más probabilidades de éxito.
4. Elegir la fórmula de internacionalización
Finalmente, hay que decantarse por una fórmula de internacionalización. Hay teorías sobre este proceso que señalan que, en una PYME, lo habitual es empezar con exportaciones puntuales, que posteriormente evolucionan a la colaboración con agentes locales o empresas y, finalmente, el establecimiento de filiales.
En cualquier caso, y elijas la fórmula que elijas, tiene que redactarse un Plan de Internacionalización, que hará de hoja de ruta. Así, sabrás de forma clara qué objetivos debes lograr y qué metas realistas se asumen.
Por lo tanto…
La internacionalización para PYMES en España tiene en cuenta varias fases y etapas. Por eso, recomendamos seguirlas para que, cuando se haga la inversión, esta se minimice. Y, aquí, las tecnologías pueden ayudar y mucho, así que te animamos a que nos contactes.