Los dos patrones de una patera que zarpó de las costas de Argelia con unas 30 personas a bordo han aceptado penas de prisión que suman un total de ocho y cuatro años, respectivamente, tras un acuerdo con la Fiscalía, que inicialmente solicitaba once años de cárcel para cada uno. Los acusados, que se encuentran en prisión provisional desde su detención, han reconocido los hechos, dictándose la sentencia en firme.
El principal acusado, que pilotaba la embarcación, ha aceptado una condena de cinco años de prisión por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, a la que se suman tres años por los tres delitos de homicidio imprudente en concurso ideal. Por su parte, el segundo acusado, encargado de manejar el GPS para guiar la patera, ha sido condenado a cuatro años de cárcel por un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, al serle retirada la acusación por los homicidios. Los dos acusados fueron representados por los letrados Mónica Moya y Nabil El Meknassi.
La Fiscalía también había solicitado indemnizaciones para los familiares de los fallecidos por un importe global de 1.110.000 euros.
La patera, de tipo semirrígida y unos ocho metros de eslora, partió de Argelia sobre las 22:00 horas del 12 de octubre de 2024, con el objetivo de enriquecerse mediante la "inmigración clandestina", cobrando a cada migrante unos 8.000 euros a través de colaboradores. La embarcación, equipada con un motor fueraborda de 300 caballos, carecía de iluminación y de cualquier equipo de rescate o de emergencias.
Durante la mayor parte de la travesía, realizada en horario nocturno, el agitado estado del mar, unido a la "alta velocidad" a la que navegaban, provocó que entrara abundante agua en la patera y que sus 30 ocupantes de origen marroquí comenzaran a sufrir "numerosos golpes e impactos con la embarcación e incluso entre ellos". Las tres víctimas mortales sufrieron golpes en la cabeza y llegaron a caer "unos encima de otros", lo que derivó también en algunos "episodios de asfixia".
La primera muerte se produjo apenas una hora después de la salida, y las otras dos se dieron en torno a las 3:00 horas. La patera acabó quedando a la deriva a causa de la rotura del motor. La embarcación fue finalmente rescatada a las 12:24 horas del día siguiente, 13 de octubre, tras más de catorce horas de viaje. El rescate se llevó a cabo por el buque 'Guardamar Polimnia' de Salvamento Marítimo, a unas 41 millas náuticas de Mesa Roldán, un punto de gran relevancia para la provincia de Almería.
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