Este mediodía, voluntarios de Cruz Roja ya estaban preparando las habitaciones contratadas por el Gobierno central en Ejido Hotel para instalar a unos 130 inmigrantes. Según la subdelegación, los migrantes no están en situación de ilegalidad, sino que están esperando la resolución de sus expedientes para recibir asilo en España.
Entre los migrantes se encuentran 55 malienses que han huido de la guerra en su país. La subdelegación ha enfatizado que estos individuos buscan refugio y protección en España debido a la situación de conflicto en Mali.
El alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, ha expresado su rechazo más enérgico tras ser informado sobre la llegada de 113 migrantes, procedentes de El Toyo. Góngora ha declarado que esta circunstancia es inadmisible para el municipio porque ya soporta una tasa de extranjería del 32%, la más alta de toda España. Además, se quejó de que la decisión se había tomado sin consultar con el gobierno municipal, que además invierte mucho dinero en mantener un aceptable nivel de convivencia entre las casi 200 nacionalidades.
El subdelegado del gobierno, José María Martín, ha respondido a las declaraciones del alcalde, calificándolas de incendiarias y racistas. Martín ha señalado que es irresponsable asociar la llegada de los migrantes con problemas de inseguridad en la localidad.