La vicepresidenta primera del Gobierno de España y 'número dos' del Partido Socialista, María Jesús Montero, ha utilizado el caso de las detenciones en la Diputación de Almería para defenderse de las críticas por presunta corrupción lanzadas desde el Partido Popular en el Congreso de los Diputados.
Durante su intervención, Montero confrontó al diputado del PP, Jaime de Olano Marí, por el cambio en el orden de las preguntas, señalando la "curiosidad" de que no preguntara en ese momento un diputado del Partido Popular de la Comunidad Autónoma de Andalucía. La vicepresidenta ligó este hecho a la necesidad del PP de "dar explicaciones de lo que está ocurriendo y ha ocurrido en la Diputación de Almería".
Montero rebatió la postura del presidente de la Comunidad Autónoma, Juan Moreno Bonilla, quien había declarado que no sabía nada del caso y que "no le cogían el teléfono en Almería". La vicepresidenta enfatizó que se trata de "un caso de corrupción que lleva cinco años investigándose, que tuvo detención de un anterior vicepresidente de la Diputación, que ahora lleva por delante a un presidente y a otro vicepresidente". Montero resaltó la incongruencia de que, ante una investigación de esta magnitud, el Partido Popular de Andalucía "no sabe nada", a pesar de que estas personas "forman parte de los órganos de dirección del PP regional".
El cruce dialéctico se inició cuando el diputado Marí atacó al PSOE con la pregunta: "¿Pero qué clases de lucha contra la corrupción nos pueden dar ustedes [si] al mínimo atisbo de corrupción, el señor Sánchez los nombra ministros, presidentas del Congreso o los vuelve a poner en las listas?". Montero respondió negando que su gobierno esté en el poder para resistir, sino para "transformar la realidad de la gente" y gobernar "por el crecimiento económico que se distribuya en forma de servicios públicos".
El diputado Marí insistió en su crítica, acusando al PSOE de "resistir instalados en la corrupción generalizada" y de maquillar datos como el paro y el crecimiento económico, concluyendo que "gobernar, señora Montero, es dar ejemplo. Ustedes el único ejemplo que saben dar es de cómo corromperse".
Montero cerró el debate con una defensa de la gestión económica del Gobierno del Estado español, asegurando que el paro es el "más bajo en 20 años" y que la economía española es la "economía desarrollada que más crece del mundo" según los organismos internacionales. La vicepresidenta concluyó que el Partido Popular opta por "ruido y fango" en lugar de hablar de la prosperidad del país.