El Ayuntamiento de Almería y el Obispado de la Diócesis han suscrito un Protocolo General de Actuación que marca el inicio de la promoción para la restauración integral y la puesta en valor del Santuario de la Virgen del Mar, patrona de la ciudad y Bien de Interés Cultural. La firma del documento, llevada a cabo por la alcaldesa, María del Mar Vázquez, y el obispo de Almería, Antonio Gómez Cantero, establece un marco de colaboración entre las dos entidades con el propósito de desarrollar el Plan Director de Restauración y Puesta en Valor del templo. Ambas instituciones comparten el compromiso de proteger y difundir este monumento emblemático, asegurando su conservación como referente histórico, arquitectónico y cultural.
El protocolo no vinculante, con una vigencia inicial de dos años prorrogables, sienta las bases para la ejecución coordinada de las intervenciones definidas en el Plan Director, un documento técnico elaborado por los arquitectos Antonio Góngora Sebastián y Eduardo Blanes Arrufat. Este plan define líneas estratégicas de acción que incluyen la restauración de las cubiertas y el refuerzo estructural, la conservación de fachadas y revestimientos exteriores, y la rehabilitación de los revestimientos interiores por fases. Asimismo, se contempla la adecuación de salas expositivas, la mejora de los espacios anexos, y diversas actuaciones de urbanización y embellecimiento en el entorno del Santuario.
La alcaldesa, María del Mar Vázquez, ha manifestado que este acuerdo subraya la colaboración conjunta del Ayuntamiento, el Obispado y la Hermandad para conseguir fondos e iniciar el Plan Director de restauración, expresando la esperanza de que comience en breve. Vázquez ha explicado que el compromiso municipal se extiende a aportar financiación, cuya cuantía está aún por determinar, y a participar en todas las actividades necesarias para valorizar este bien patrimonial. La regidora ha señalado que el Santuario, además de su gran simbolismo religioso y de ser visitado por miles de almerienses cada año, posee un carácter monumental que debe conservarse.
Por su parte, el obispo Antonio Gómez Cantero ha destacado la relevancia del Santuario como lugar de devoción a Nuestra Señora del Mar y como punto de encuentro para los almerienses. El obispo ha extendido su agradecimiento al Ayuntamiento y a la alcaldesa por el esfuerzo que realizarán para poner en valor este espacio, que considera parte intrínseca de la identidad espiritual y cultural de Almería.
El hermano mayor de la Hermandad de la Virgen del Mar, Jorge Juan Fernández Compán, ha expresado su satisfacción por la firma del protocolo, destacando que el Ayuntamiento se convierte en la primera institución en sumarse a este proyecto, el cual considera fundamental para la conservación del edificio. Ha recordado que el Santuario siempre ha sido el centro de la devoción mariana en Almería y ha compartido la ilusión de la Hermandad por materializar este objetivo necesario para la preservación de un patrimonio que pertenece a todos los almerienses.
El Plan Director no solo se enfoca en las necesidades constructivas para la estabilidad y restauración del templo, sino que también busca su puesta en valor social y cultural, a través de diversas iniciativas de divulgación y uso público. Estas incluyen la creación de espacios expositivos permanentes, la organización de visitas guiadas, la investigación histórica y arqueológica sobre el conjunto conventual, la incorporación del Santuario a los itinerarios culturales y turísticos de la ciudad, y el uso de plataformas digitales para difundir su historia y patrimonio.
Para garantizar la correcta coordinación y el avance de las acciones previstas, se establecerá una Comisión Mixta, que estará integrada por representantes del Ayuntamiento y del Obispado. Es importante destacar que las actuaciones concretas derivadas del Plan Director se formalizarán más adelante mediante convenios específicos, en los que se definirá la financiación, la organización y la ejecución de cada fase. El Santuario de la Virgen del Mar, una pieza clave del antiguo convento de Santo Domingo y hito de la historia de Almería desde su fundación en el siglo XVI, es el foco de este acuerdo que une esfuerzos para garantizar su preservación y proyectar hacia el futuro uno de los símbolos más identitarios de la ciudad.
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