Almería empata con el líder en Riazor

El Almería ha demostrado que está en un momento dulce de la temporada, logrando un valioso empate ante el Deportivo de La Coruña, líder del campeonato. Este resultado se suma a las dos victorias consecutivas obtenidas contra el Sporting de Gijón y la UD Las Palmas, lo que refuerza la confianza en el equipo dirigido por Rubi.

En un primer tiempo brillante, Bonini abrió el marcador con un gol que hizo vibrar a los aficionados. Sin embargo, el segundo tiempo trajo consigo una presión intensa por parte del Deportivo, que logró igualar el encuentro. A pesar de los apuros, los rojiblancos demostraron su capacidad para inquietar al rival y mantener la competitividad.

Decisiones tácticas y cambios estratégicos

Rubi realizó tres modificaciones en su alineación respecto al partido anterior. Dos de estos cambios fueron decisiones técnicas y uno fue obligado debido a la sanción de Embarba. Arnau tomó su lugar en la banda derecha, aportando verticalidad y recorrido ante rivales peligrosos como Yeremay y Quagliata. Leo Baptistao ocupó la posición de "9" en lugar de Soko, mientras que André Horta debutó como titular en el centro del campo, aportando calidad al juego rojiblanco junto a Dzodic.

Con esta nueva formación, el Almería buscaba ser el primer equipo en marcarle al Dépor en su estadio, donde permanecía imbatido hasta ese momento. La clave estaba en mantener una sólida defensa para contrarrestar el potencial ofensivo del rival. Y así fue: los almerienses mostraron un gran despliegue defensivo y tuvieron varias oportunidades para aumentar su ventaja.

Un partido lleno de emociones

El primer tiempo estuvo lleno de alternativas entre dos equipos que demostraron sus ambiciones. El Deportivo dio aviso temprano con un lanzamiento que Andrés Fernández desvió a córner. Pero pronto llegó la respuesta del Almería: tras un gran pase de Leo Baptistao a Nico Melamed, Bonini anotó de cabeza tras un córner, poniendo el 0-1 en el marcador.

A pesar de tener una buena primera mitad, el Almería enfrentó dificultades en los primeros minutos del segundo tiempo. El Deportivo salió decidido a presionar y recuperó terreno rápidamente. En este contexto complicado, Rubi movió piezas desde el banquillo para recuperar control sobre el juego.

Resiliencia y determinación

Los cambios realizados por Rubi dieron frutos cuando Yeremay empató con un golazo desde fuera del área. Aunque este golpe afectó temporalmente al equipo rojiblanco, las sustituciones posteriores lograron estabilizar al Almería. Gui Guedes y Baba entraron para reforzar el centro del campo, permitiendo que los indálicos volvieran a dominar la posesión y finalizaran el partido presionando al área gallega.

Así se cerró una jornada positiva para la UD Almería, dejando claro que están listos para seguir luchando en esta emocionante temporada. Un empate valioso ante uno de los grandes siempre es motivo de optimismo y confianza para lo que está por venir.

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