Que la feria de este agosto del 2025, que hoy da comienzo, va a ser distinta a las de ediciones anteriores nadie lo pone duda. Podríamos decir que esta sí que va a ser histórica. Y no precisamente por su grandiosidad, originalidad o participación, que está por ver, marcará un hito por ser la primera vez que se enfrenta a una ciudad en obras en su centro neurálgico, y con los cambios que se producen en la del mediodía, es evidente que no será la misma que años anteriores. Si a ello unen ustedes que la de la noche, por muy inclusiva que nos la venda nuestro ayuntamiento, se va dejando casetas por el camino, no es como para cantarle fandanguillos a la luna de este hermosa y última semana del calentito mes de agosto.
Pese a todo, y lo sabe los que mandan en la ciudad, los vecinos y visitantes están dispuestos a disfrutar de la feria de este año como lo han venido haciendo en ediciones anteriores. El ánimo abierto lo tenemos, las ganas también, no es que se tengan los bolsillos llenos, por mucho que nos diga lo contrario el equipo económico del gobierno que dicen, eso dicen, que gobierna en España, ahora solo hace falta que la feria ponga el resto. Y a ello vamos a remitir la alegría a vivir en estos días. Lo que hay que desear es que no falte el ánimo en el ciudadano, si lo tenemos, seremos capaces de sobreponernos a cualquier evento negativo que se produzca durante esas horas en las que buscamos la felicidad.
Los cambios que se van a producir nos lo han ido dando a conocer la corporación, y todos por esa obligación de una ciudad en obras, con las tripas abiertas en muchos puntos, y a las que a veces no le vemos el final. Pero no se pongan de mal humor. Habrá problemas para coger un taxi en la ciudad, pero a la salida del recinto no lo tendrá. Los autobuses han tenido que cambiar su rutas, pero con santa paciencia, a lo Job, usted se ubica en la parada y a esperar que llegue el que lo lleve a la calle del infierno, en caso de que vaya con la chiquillada de la familia.
Además, tenemos la feria más inclusiva que se conoce, nos comunica la señora alcaldesa. No tengo muy claro lo de que sea más inclusiva. Espero que uno de estos días nos lo cuente. Si se trata de una horas con la música a menor volumen, nos parece bien, pero es inclusiva durante unas horas y un día, el resto. No veo la noria inclusiva, tampoco los cochecitos de choque, ¿es inclusivo el viejo látigo?, ni siquiera los caballicos de la reina, tan majos y bonicos ellos. Pero si lo dicen los sabios del ayuntamiento, que son los que más saben: Tenemos la feria más inclusiva del mundo. ¡Disfrútela!