Pues seguramente, más de Susana. A ver, qué remedio. Si uno tiene un cargo público en Andalucía gracias a su militancia socialista (si no estás en una lista que hace el partido, la ciudadanía no te puede elegir), o si trabaja en la mayor empresa de nuestra tierra, y que no es otra que la administración autonómica que lleva desde su creación gobernada por la misma formación política, y lo haces en un cargo de “libre designación” (cuyo número nadie ha sabido determinar ni por aproximación a unidades de millar), pues no sé si en esas circunstancias tendrá muchas ganas de hacerse el héroe yendo a escuchar –sólo eso- a Patxi López o a Pedro Sánchez, los dos único que han destapado su juego.
Me decía el vasco que unas Primarias no son el momento de “ajustar cuentas”, pero indudablemente sí que lo es. A la vista está que, en Almería, los únicos que se definen colocándose frente a Susana son aquellos que tienen alguna cuenta pendiente con ella, o con sus representantes en la provincia, entre ellos también algún cargo público, pero que a todas luces se la tiene guardada. Y la irrupción en un puesto de visibilidad política de un socialista al que se daba por amortizado, quizá sea sólo un primer paso para generar un frente contra la sevillana.
Desde el PSOE de Almería sostienen ese argumento como elemento esencial para descartar que la secretaria general del PSOE-A pueda ser derrotada si deja de marear la perdiz para liderar su partido, esta vez sin secretario general ni gestora, interpuestos.
Lo cierto es que también confían en que eso sea cierto, es decir, en que Susana Díaz logre la Secretaría General del PSOE federal porque sus adversarios -¿tratándose de un partido político, habría que decir “enemigos”?- se dividan.
Lo que está claro, es que en Almería hay precisamente eso, división, y que también existe en el conjunto andaluz, algo que en otras épocas era impensable. Si Susana Díaz ha sido incapaz de mantener unido el partido en Andalucía ¿Cómo pretende hacerlo a nivel español?
Patxi López se ofrecía este pasado fin de semana a integrar y a integrarse, pero nada se ha oído en ese sentido de la andaluza… que sigue sin mostrar sus cartas, esperando a ver qué hacen aquellos cuya nómina depende de su firma.
Es que a Susana Díaz no se le ha oído hablar de nada… mientras Pedro Sánchez lo hace en clave de elecciones generales, y Patxi López es el único que está “tocando lo que toca”, es decir, de organización del partido, que es lo que está manga por hombro.
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