El consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, Ramón Fernández Pacheco, ha exigido un mejor mantenimiento de la desaladora de Carboneras, ubicada en Almería. Esta solicitud surge tras el apagón que dejó a la instalación sin suministro eléctrico el pasado lunes, lo que impidió su funcionamiento y, por ende, el abastecimiento de agua.
En una entrevista concedida a Canal Sur Televisión y recogida por Europa Press, Fernández-Pacheco subrayó que las inversiones multimillonarias realizadas en esta desaladora, considerada la más grande de Andalucía, requieren un mantenimiento adecuado para asegurar su rápida recuperación y garantizar el suministro de agua potable.
El consejero alertó sobre los problemas que enfrentó la desaladora durante el verano anterior, cuando sufrió múltiples averías que afectaron a los regantes del campo de Níjar. Aseguró que desde la Junta se había notificado esta situación a Acuamed y al Ministerio para la Transición Ecológica, solicitando acciones correctivas.
Conflictos Laborales y Abastecimiento
Fernández-Pacheco también hizo referencia a un conflicto laboral entre los trabajadores de Acuamed y la empresa gestora. Según el consejero, las condiciones laborales actuales son deficientes e incluso carecen de los estándares básicos de seguridad. Tras negociaciones entre ambas partes, se logró un principio de acuerdo que permitirá garantizar el abastecimiento de agua, aunque no se asegura el funcionamiento completo de la desaladora.
El titular andaluz del área del agua mostró su confianza en que el agua llegue pronto a las 150.000 personas que residen en las zonas del Levante y Almanzora, quienes dependen del suministro producido por esta instalación. Además, destacó su disposición para colaborar en lo necesario para mejorar la situación.
Suministro Asegurado
Por otro lado, Galasa, la empresa encargada de gestionar el agua en el Levante almeriense, comunicó a los municipios mediante carta que el suministro estaría "garantizado" en breve gracias a la reactivación de la desaladora tras el corte eléctrico. Se espera que hoy se cuente con caudales suficientes y aptos para consumo.
La empresa está trabajando junto con los organismos competentes para implementar las medidas necesarias que aseguren la continuidad del servicio municipal. Sin embargo, algunos municipios como Garrucha han reportado problemas debido al vaciado de sus depósitos mientras se realizan trabajos para activar seis líneas de producción en la planta.
A partir de esta situación, desde el Ayuntamiento se explicó que las diferencias en el impacto del desabastecimiento entre localidades se deben a su capacidad de almacenamiento; lugares como Vera y Mojácar han podido mantener un suministro durante más tiempo gracias a sus depósitos más grandes.