Padres condenados por permitir el absentismo escolar de su hijo durante dos años

Una juez en Almería ha dictado una sentencia contra unos padres que permitieron que su hijo menor faltara a clases "sin causa justificada" durante dos años escolares, específicamente entre 2017 y 2019, cuando el niño tenía 14 años.

Según la resolución judicial, a la que tuvo acceso Europa Press, los progenitores han sido considerados responsables de un delito de abandono de familia en su modalidad de incumplimiento de los deberes inherentes a la patria potestad al haber tolerado la ausencia del menor en el centro educativo.

Faltas de asistencia documentadas

La juez desestimó las explicaciones ofrecidas por los padres para justificar su conducta. En su fallo, subrayó la "extensa" documentación que acredita las faltas de asistencia del niño, las cuales se extendieron más allá del período en el que el padre alegó estar en prisión y no conocer la situación.

La magistrada enfatizó que "ambos progenitores tenían conocimiento de la situación de absentismo escolar", y destacó que la madre incluso firmó un apercibimiento emitido por el Área de Protección del Menor. Este documento advertía sobre las faltas injustificadas y sus posibles consecuencias legales.

Informes y testimonios relevantes

A esta evidencia se suman informes sobre el menor y el testimonio de una trabajadora social, quien describió las intervenciones realizadas, así como los contactos telefónicos con la familia. También se incluyeron entrevistas con la tía materna del menor y consultas con el IES donde está matriculado, además de una visita al hogar familiar.

La jueza argumentó que "en ningún caso pueden justificarse las faltas de asistencia al colegio porque no le guste ir o no quiera estudiar". Según ella, siendo un menor, no puede quedar a su libre albedrío decidir si asiste o no a clase; es responsabilidad de los padres garantizar su formación y educación, lo cual es también un derecho del menor.

Pena impuesta

Como resultado de este caso, cada uno de los padres ha recibido una pena de multa de tres meses y 15 días a razón de seis euros diarios. Esta sanción fue atenuada debido al tiempo transcurrido desde que comenzaron las faltas escolares.