La secretaria de Empleo del PSOE de Andalucía, Carmen Castilla, ha cargado este viernes contra la actuación del Partido Popular ante el caso Mascarillas de Almería, cuestionando la contundencia de las medidas adoptadas y sugiriendo la posibilidad de un "pacto de silencio" por parte de la dirección popular andaluza.
En rueda de prensa en la sede del PSOE-A en Sevilla, Castilla mostró la "gran preocupación por la presunta corrupción en Almería del Partido Popular", un caso que, según recordó, se viene investigando "desde el año 2021, con cero reacción" hasta ahora del presidente de la Junta y del PP-A, Juanma Moreno.
El foco de la crítica socialista se centró en la respuesta del PP tras la puesta en libertad con medidas cautelares del presidente de la Diputación, Javier Aureliano García, el vicepresidente Fernando Giménez, y el alcalde de Fines, Rodrigo Sánchez, todos ellos suspendidos cautelarmente de militancia.
Castilla expresó su sorpresa por un hecho ocurrido el jueves: "Al parecer, según hemos conocido por la prensa, los detenidos" fueron "directamente" de los "calabozos de la comandancia de la Guardia Civil de Almería al despacho de la Diputación Provincial, a una reunión con el secretario general" del PP-A, Antonio Repullo.
La dirigente socialista se preguntó entonces: "¿Por qué manda" Juanma Moreno "a negociar a su secretario general?". Y planteó la grave duda: "¿Es esto un pacto de silencio?".
La secretaria de Empleo del PSOE-A se mostró especialmente crítica con las declaraciones de Ramón Fernández-Pacheco (que asume la presidencia del PP de Almería) durante la rueda de prensa de este viernes, en la que se confirmaron las renuncias de García y Giménez a sus actas.
"Lo que más nos sorprende es que en la rueda de prensa de Ramón Fernández-Pacheco... haya estado agradecido hasta el final por los servicios prestados por los ya expresidente y exvicepresidente de la Diputación almeriense y porque han dejado su acta", señaló Castilla.
Tras esto, la socialista lanzó su pregunta principal al PP-A: "¿Es que entonces no los han expulsado" del PP-A, "como decía Moreno Bonilla? Esa es la pregunta", aseveró, incidiendo en que el caso "lleva abierto desde hace cinco años" y el presidente del PP-A "se podría haber preocupado de qué estaba ocurriendo en Almería".
Para Carmen Castilla, se trata de un caso "muy grave" enmarcado en la pandemia de Covid-19 que "todos sufrimos", por lo que sentenció que "es totalmente intolerable, inaceptable que se hiciera negocio en esos momentos tan duros donde miles de personas se estaban muriendo a propósito" de dicha enfermedad.